Breves de deportes

Cenicienta en la final

MOSCÚ, Rusia, julio 12 (EL UNIVERSAL).- El fotógrafo sólo vio que se le vino toda Croacia encima. El festejo de Mario Mandzukic fue de él. Todos lo abrazaron, todos lo besaron, pues quiéralo o no, es parte de la historia.

Croacia, el país que apenas tiene 27 años de vida, ese que luchó por su separación de Yugoslavia, el futbol de ese país... Está en la final de la Copa del Mundo de Rusia.

No podía ser de otra forma, había que irse hasta el alargue, no saben hacerlo de forma diferente. No se cansan, no se quejan, no dejan de luchar, es su idiosincrasia.

Por eso, el gol del triunfo cayó al minuto 109. Perisic, quien había dado el empate a uno, saltó por la pelota, la golpeó con la coronilla y salió al centro del área, donde Manduzick apareció para mandarla al fondo de la portería.

Cuando cayó el gol, los 4 millones de habitantes saltaron al tiempo que gritaron. El futbol, parte de la sociedad, hace recordar los años de sufrimiento, esos cuatro años de guerra que se llevó un sinfín de víctimas, guerra que estos jugadores sufrieron en su niñez, pero que ahora de adultos olvidan, porque son finalistas de una Copa del Mundo, van por el título, el que disputarán el próximo domingo ante la poderosa Francia.



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FMF es criticada por su afición

MOSCÚ, Rusia, julio 12 (EL UNIVERSAL).- Durante el debate sobre Diversidad y Lucha contra la Discriminación, realizado por la FIFA, México fue recurrente.

El famoso grito de "¡Eeeh pu...!" ha marcado al futbol nacional, que es tomado como ejemplo para mal y para bien.

Piara Powar, ejecutivo de la Red Fare, que promueve la lucha contra el racismo y la discriminación en Europa, además de dar seguimiento a los diversos casos que se manifiestan en todas las ligas, ha dicho que la Federación Mexicana de Futbol (FMF) se aprovecha de que la FIFA no considere los gritos homofóbicos como racismo, para que no la sancione, tomando en cuenta ese término.

"La homofobia no tiene el mismo estatus en castigos que otros incidentes discriminatorios según la FIFA. No sé si sean por las lagunas que hay en el reglamento. A los mexicanos se les tolera eso y no lo clasifican como actitudes racistas", dijo Powar.



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Figuras realizan fiesta en Mundial

MOSCÚ, Rusia, julio 12 (EL UNIVERSAL).- Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis goles recibió Jorge Campos, en el partido de Leyendas de la Federación Internacional de Futbol Asociado (FIFA), celebrado en La Plaza Roja.

El portero acapulqueño hizo equipo, el Rojo, junto con jugadores de la talla del alemán Lothar Matthäus, el brasileño Cafú, el argentino Juan Pablo Sorín y el portugués Nuno Gomes, quienes se enfrentaron al Azul, conformado por el uruguayo Diego Forlán, el español Michel Salgado y el colombiano Juan Pablo Ángel, entre otros.

Campos salió vestido con su tradicional suéter multicolor, ese que hizo famoso durante los 90, pero le trajo mala suerte, ya que en la primera parte, que fue de 20 minutos, le hicieron seis goles, cuatro pasándole el balón entre las piernas.

Tan aciaga era la tarde para el dos veces mundialista por la Selección Mexicana, que Cafú y Matthäus le reclamaban, en broma, su supuesto bajo nivel... y el carismático ex guardameta ?a modo de defensa? gritaba: "Me dejan solo".

Fue hasta la segunda parte cuando Campos se reivindicó. Comenzó a detener todo tipo de disparos y hasta salió jugando en un par de ocasiones, para conseguir los goles que le dieron el empate a su equipo.