La maternidad al ritmo de Abba

Como una adaptación de un musical que a su vez se basa en al vasto catálogo del mejor grupo pop de Suecia, Mamma Mia! : la película tenía un argumento bastante simple para sustentarse. Con una recaudación que superó los 615 millones de dólares, siendo la quinta película más taquillera de un año donde aparecieron Iron Man y la segunda parte del Batman de Christopher Nolan con Heath Ledger como el Guasón, ¿qué productor se iba a negar a hacer una secuela?
Una década después del estreno, llega la continuación: Mamma Mia! Vamos otra vez . Nuevamente, la joven Sophie (Amanda Seyfried) tiene dudas. En la película original, basada en el musical Mamma Mia!, esas dudas eran sobre la identidad de su padre, que resultaron ser tres candidatos. En la secuela, una película inesperada pero muy agradable, la joven protagonista vuelve a sentirse igual. Esta vez es debido a su madre, quien murió un año antes de comenzar esta película. Sí, uno de los mayores atractivos que tenía Mamma Mia! -ver divertirse y desafinar las canciones de Abba a Meryl Streep (Donna)- es cambiado por una nueva camada de actores que llegan para contar la juventud de aquella protagonista.
Es que si bien Streep tiene un papel muy menor en esta continuación, su importancia sobrevuela en la película gracias a los recuerdos de su hija, sus divertidas amigas y su eterna pareja, Sam (Pierce Brosnan).
Así, mientras en el presente se cuenta cómo Sophie tiene que hacerse cargo de reinaugurar el hotel que siempre soñó tener su madre; superar alguna crisis con su pareja Sky (Dominic Cooper) y enterarse que está embarazada (aunque ella sabe quién es el padre), en paralelo se cuenta la juventud de Donna en 1979, quien ahora tiene el rostro de Lily James. Se narra cómo llega a la isla ficticia de Kalokairi y conoce a las versiones jóvenes de Sam, Harry y Bill, cuya trama podría ser una película por si misma.
La trama principal de la película es la maternidad: la de Donna antes y la de Sophie ahora. Seyfried es ahora la adulta que lucha contra sus inseguridades y miedos mientras que la joven Donna de James es la chica despreocupada. De esta forma, Mamma Mia! Vamos otra vez es una película que habla sobre los sacrificios que conlleva el ser madre, así como la felicidad que esto trae también. Por esta razón, y otra que no vale la pena adelantar, la película es una grata sorpresa que logra superar a la versión original. Y si bien las canciones más conocidas de Abba no regresan en esta oportunidad, el conjunto sueco, que ha sido la banda sonora de la vida de muchos de nosotros, tiene hits como para varias películas más y aquí vuelven a ser el hilo conductor de la historia.
Debido a la estructura narrativa, que varía entre dos tiempos, la película guarda cierto parecido, salvando las distancias, con El Padrino II , en la que también se cuenta la juventud de los padres y cómo aquellas acciones repercuten en los hijos.
Claro que aquí no hay un Mario Puzo, Francis Ford Coppola ni Robert De Niro, pero hay muchas ganas de hacer una película entretenida, llena de canciones, buenas coreografías y una historia algo melancólica pero divertida y romántica. Lo que se prometió se cumple.
También el recurso de utilizar un corifeo para contrastar lo que sienten los personajes está de regreso. El coro, que en el antiguo teatro griego comentaba los que sucedía en el escenario y en la versión original eran un puñado de pobladores, ahora es reemplazado por compañeros de universidad, comensales de una mesa y hasta los pasajeros de distintos barcos que llegan a la isla para la reapertura del hotel que ahora dirige Sophie.
El no pertenecer a un musical conocido, le permite al director y guionista Ol Parker crear secuencias musicales más vistosas, ya que no depende de una coreografía previamente creada, ni historias que tienen que adaptarse al cine. Esto es una historia completamente nueva que va creciendo a medida que la película avanza. Así, estas dos historias paralelas confluyen en un final muy vistoso y divertido. Es que cuando la película parece llegar a su final aparece Cher como la madre de Donna. "He decidido comprometerme con esto de ser abuela", dice apenas aterriza de su helicóptero, como la diva que es. Y con una melena rubia, la cantante que ya dijo que hará un disco con las canciones de Abba, tiene uno de los momentos más divertidos y esperados de la película.
Mamma Mia! , vuelve a demostrar que hasta los momentos más tristes pueden mejorar con un poco de música, algo de baile y buenos amigos.
Estados Unidos, 2018.> Fotografía: Robert D. Yeoman. > Con: Amanda Seyfried, Lily James, Pierce Brosnan, Stellan Skarsgård, Colin Firth, Meryl Streep, Christine Baranski y Cher. > Duración: 114 minutos.