Triunfo que endereza su carrera

Luego de pasar varios años sin un rumbo fijo en el boxeo, McWilliams Arroyo siente que su carrera ha comenzado a encarrilarse, primero con la firma con la compañía Miguel Cotto Promotions en diciembre y ahora con la victoria del sábado ante el mexicano Carlos Maldonado.
Para Arroyo, estos han sido dos pasos positivos, que ayer celebraba con mucha satisfacción.
"Estoy muy contento. Por lo menos ya vamos hacia lo que queremos con esta victoria, que gracias a Dios conseguimos. Ya, por fin, va a parar el tiempo de inactividad que llevaba y estoy muy agradecido de la compañía de Miguel Cotto por la oportunidad que me han dado", apuntó Arroyo ayer en conversación telefónica con El Nuevo Día.
Arroyo se coronó como campeón regional peso mosca (112 libras) latino de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) al vencer por decisión unánime a Maldonado. El exolímpico (18-4, 14 KO’s) logró controlar la acción de la pelea a 10 asaltos, y hasta derribó a su oponente en la cuarta vuelta con un gancho al rostro. Las tarjetas de los jueces fueron de 99-90 en una de ellas y 100-89 en las otras dos.
Ahora, el plan de la compañía Miguel Cotto Promotions es que Arroyo haga una pelea en el verano y que de ahí opte por una oportunidad titular en el peso mosca para finales de este año. El campeón actual de esa división es el japonés Kosei Tanaka (12-0, 7 KO’s), quien el próximo 16 de marzo defenderá su título ante su compatriota Ryoichi Taguchi (27-3-2, 12 KO’s).
Vino a pelear
El fajardeño calificó a Maldonado (11-3, 7 KO’s) como un oponente fuerte, que resistió sus golpes y que vino con "una gran condición". Agregó que le hubiera gustado terminar la reyerta por la vía rápida, pero prefirió no arriesgarse.
"Es un oponente fuerte porque le di golpes y no se rendía. Vino con una gran condición. Tal vez si hubiera sido a 12 asaltos no creo que hubiera podido (terminar) porque al final él (Maldonado) no podía consigo mismo, pero era un oponente muy bravo", consignó.
"Aguantó el castigo. Lo dominamos en todo momento, pero vino a pelear, no cogió miedo. Porque a pesar de todos los golpes que yo le estaba dando, y mira que le di golpes duros, él no se estaba quitando y tenía deseos de ganar. Pero en ocasiones pensé que se iba a ir antes", agregó el púgil de 33 años.
Arroyo expresó que esta victoria a la distancia demostró que está en buena condición física, a pesar de que llevaba tres años sin medirse en este peso. El púgil había subido a las 115 libras, pero bajó a las 112 cuando firmó con Miguel Cotto Promotions. De hecho, el deportista dijo que se sintió muy bien al regresar a esta división.
Esta victoria también fue especial para el pugilista porque llevaba cuatro años sin pelear en Puerto Rico. Su última pelea en la isla fue victoria ante el mexicano Víctor Ruiz en abril de 2015.
Satisfecho Miguel Cotto
Por otro lado, Arroyo compartió que logró hablar con el promotor cagüeño luego de terminada la pelea.
"Miguel me felicitó, y hablamos un poco. Estaba muy contento. Me dio unos consejos y me dijo que puedo lograr todo lo que me proponga. Yo también quería hablar con él para darle las gracias por su confianza".
En cuanto a los planes para sus próximas peleas, expuso que, si se cuadra algo para antes de verano, estaría dispuesto a subirse al cuadrilátero. Sin embargo, confía en las decisiones de sus promotores.
"Los planes son que pelee en verano, pero si hay algo antes, mejor. Mi trabajo es entrenar y pelear, si ellos quieren que pelee antes, estoy dispuesto. Eso yo se lo dejo a ellos, que son los encargados".