El Plan de Desarrollo de Duque

Manuel José Cárdenas*
Cumpliendo los plazos legales, el Gobierno Nacional radicó en el Congreso de la República el Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022 llamado ‘Pacto por Colombia, pacto por la equidad’. El proyecto presenta un avance considerable con relación a las bases del mismo que había presentado el año pasado para discusión pública y un esfuerzo enorme para meter los diferentes temas, denominados ‘pactos’, en una camisa de fuerza tan estrecha como es ‘la legalización, el emprendimiento y la equidad’. De todos esos ‘pactos’, indudablemente el más novedoso es el que se refiere a la ‘Transformación digital de Colombia’, el cual busca conectar al Gobierno, empresas y hogares con la sociedad del conocimiento. Aunque sus metas son muy ambiciosas y es posible que no todas se puedan alcanzar en esta administración, hay que destacar que es el primer plan de desarrollo que tiene una visión integral del tema. La transformación digital es un asunto transversal que debería pasar por todas las reparticiones de la administración pública nacional a través de los diferentes ‘pactos’ del Plan, pero desafortunadamente el proyecto de ley, aunque avanza en este sentido, lo trata en diferentes partes del mismo, como si fuera un tema vertical, lo centra en el Ministerio de las TIC y no lo relaciona con los temas de competitividad, emprendimiento e innovación, salvo en lo que tiene que ver con la economía naranja. En efecto, de una parte, autoriza a la Presidencia de la República para crear una instancia de coordinación para la transformación digital que esté a un nivel transversal y suprasectorial, cuyas decisiones sean vinculantes. De otra, sin coordinación con lo anterior, busca consolidar la institucionalidad del Sistema Nacional de Ciencia Tecnología e Innovación (SNCCTI) como soporte a la productividad empresarial y a la competitividad territorial, y para ello propone transformar el Comité Ejecutivo del SNCCTI en una instancia supraministerial. Igualmente, establece que el Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre), en coordinación con las entidades del SNCCTI, deberá aclarar los roles y competencias de las entidades miembros del sistema e incorporará un mecanismo de gerencia de proyectos, con base en los planes de acción de los comités del SNCCTI. Finalmente, para evitar duplicación se establece que el Programa de Transformación Productiva (PTP) se orientará hacia temas vinculados a la productividad e iNNpulsa en promover la innovación y el emprendimiento, como si ellos se pudieran separar. Como se puede observar, el Gobierno aún no tiene una idea muy clara de la reforma institucional que desea realizar. Además de que no crea un órgano único de coordinación, le da a los consejos, que busca crear o reformar, funciones supraministeriales y suprasectoriales, sin precisar el alcance de las mismas, con el agravante de que en el caso del SNCCTI esas funciones supraministeriales no se las da al órgano directivo de este Sistema, que es el Consejo, sino al Comité Ejecutivo del mismo. Por esta razón, entre otras, es que el Gobierno está pidiendo al Congreso, por seis meses, facultades extraordinarias para crear, fusionar, modificar o suprimir entidades o consejos del orden nacional que requieran normas con fuerza de ley. Hay que anotar que las facultades solicitadas son muy amplias y, como lo requiere la Constitución Política, sería conveniente que se precisaran mucho más.
*Consultor internacional emece1960@yahoo.com