Un matrimonio cuesta abajo

El que "Downhill", producción de Searchlight Films que ya está disponible en varias plataformas digitales de alquiler y compra de películas, sea una comedia protagonizada por Will Ferrell y Julia Louis-Dreyfus podría crear las expectativas equivocadas.
Aunque ambos actores han tenido la oportunidad de dar interpretaciones complejas y con diferentes matices, en el género de la comedia ambos están mucho más asociados con caricaturas unidimensionales, Ferrell en particular. Ese tipo de personaje sería lo peor que podría suceder en esta película.
Desde los primeros minutos del filme queda claro que esta es una comedia que va explorar la dinámica incómoda de un matrimonio que está en deterioro. Para que eso funcione, el espectador tiene que estar atado emocionalmente a ambos personajes. El reto para los actores es justificar las acciones cuestionables de sus personajes sin que el público los pueda descartar como un par de idiotas. Afortunadamente, tanto Ferrell como Louis-Dreyfus triunfan en esta encomienda.
Aunque el humor del filme no es exactamente sutil, la elegancia de la propuesta es acentuada por el trabajo de los actores principales.
Al comienzo del filme todo aparenta estar bien. Billie (Louis-Dreyfus) y Pete (Ferrel) están de vacaciones en Austria con sus dos hijos preadolescentes y su agenda incluye mucho tiempo esquiando. Estos planes son interrumpidos por una avalancha que sucede extremadamente cerca de donde los protagonistas están almorzando con sus hijos. Las reacciones opuestas de Billie y Pete es lo que destruye por completo la dinámica de su matrimonio. Ella se lanza sobre sus hijos pensando que van a perecer juntos. El agarra su celular y sale corriendo, abandonando a su esposa y sus hijos. Durante el resto del filme, el motor de la comedia es cómo los personajes tratan de continuar con sus vacaciones como si nada hubiera sucedido cuando claramente tienen mucho de qué hablar.
Vale pena aclarar que este filme es un adaptación del filme suizo "Force Majeure". Aunque el humor sofisticado y sagaz de la versión original es canalizado por la dirección de Nat Faxon y Nick Rash (The Way, Way Back), hay par de ocasiones en esta película donde personajes de una versión desastrosa dominan la pantalla. Esto incluye a la empleada del hotel que cuenta todo sobre su vida sexual (Miranda Otto) y un entrenador italiano (Giulio Berruti) que quiere seducir a Billie.
Afortunadamente, los actores principales nunca caen en esa trampa. Ambos trazan con detalles inesperados dos personas que han estado negando una crisis inevitable desde hace mucho tiempo. Esto es lo que permite que el humor del filme tenga un impacto que aparenta ser sutil, pero está muy bien atinado.