Funcionó el empujoncito

Cuando un ciclista está subiendo al alto de Patios y siente que la cumbre supera sus fuerzas, un empujoncito puede no ser suficiente, pero tres empujoncitos, en los meses más difíciles y críticos, seguro lo ayudarán a superar el reto y tener el impulso para continuar. La evidencia objetiva muestra que el día sin IVA ha sido el empujoncito económico y conductual que se esperaba. Siempre he sido positivo frente al futuro económico del país, pero hay que partir de la información y los datos para acertar en el análisis. Tomando la información de la declaración de retenciones en la fuente y factura electrónica de este mes de mayo, encontramos que las ventas de las actividades de la economía bajaron 25,7 % frente a mayo del 2019. Podemos identificar que el 28,6 % de las empresas han reducido sus ventas en más de un 50 % y que el 46,4 % de las empresas tendrían problemas de liquidez si se mantiene su estructura de costos operativos. Ahora bien, esta semana el Dane informó que en mayo la tasa de desempleo fue de 21,4 %, lo cual significa que muchos más colombianos no están generando ingresos para su sostenimiento y el de su familia, y entran a engrosar las cifras de personas que deben salir a buscar nuevas fuentes de ingreso. Cuando la actividad económica y el empleo se reducen, necesariamente se baja el recaudo de impuestos, pues nuestro sistema es principalmente transaccional. Cuanto más se dilate la reactivación económica, menos recursos tendremos por fuentes tributarias. Pero, más importante, el recaudo en el mediano y largo plazo depende de la capacidad resiliente de los colombianos de salvar sus negocios y empresas, especialmente las más pequeñas o mipymes, que son el 99 % y aportan más del 80 % del empleo. El nobel de economía 2017, Richard H. Thaler, desarrolló la teoría del ‘pequeño empujón’ (nudge), que estaría en línea con los días sin IVA que hemos propuesto para generar efectos positivos en la economía. Después de dos días sin IVA, podemos concluir que los colombianos quieren pasar la página y seguir adelante. Esta medida logró aumentar 4 veces las ventas del comercio, 10 veces las ventas a través de plataformas electrónicas y, lo más importante, se lograron proteger 1,2 millones de empleos directos y más 3 millones de empleos adicionales asociados con el comercio. Este empujoncito sin duda produjo resultados positivos en la actitud de los colombianos y marcó el momento de la reactivación económica del país. Los comerciantes se ajustaron a nuestra nueva realidad y entendieron que debían transformarse. Los consumidores tomaron decisiones de consumo para acceder a bienes que necesitaban o deseaban, a mejores precios. Las autoridades y los establecimientos de comercio demostraron que, con buena actitud, disciplina y rigurosidad, la jornada podía desarrollarse dentro de las normas y los protocolos de bioseguridad. Otro dato, relevante en formalización de la economía: el uso de pagos electrónicos aumentó durante la jornada 4,5 veces. Esto demuestra que los colombianos estamos entendiendo que la transparencia y honestidad son fundamentales para que tengamos un ambiente de negocios equitativo, en el que se premie a quienes cumplen con la ley y sus obligaciones. Estamos entendiendo que para crecer necesitamos una ‘Colombia más honesta’. Cuando se diseñó esta medida, si bien se seleccionaron algunas categorías de bienes exentos (vestuario, calzado, electrodomésticos, equipos deportivos, útiles escolares e insumos agropecuarios) que correspondieron a la sexta parte de las ventas en estos días, se esperaba que el impacto positivo fuera, como sucedió, sobre todo el comercio. En otras palabras, con una inversión o incentivo fiscal solo referido a las categorías exentas (aproximadamente $ 170.000 millones), se logra un impacto relevante en ventas de todas las categorías por valor de $ 5,4 billones por día. Algunas preguntas y respuestas: ¿cuánto se hubiera vendido sin el día sin IVA? La cuarta parte. ¿Cuántos empleos se hubieran perdido? Muchos. * Director General de la Dian
El día sin IVA
José Andrés Romero Tarazona*
Esta medida marcó

el momento de

la reactivación económica del país. El uso de

pagos electrónicos aumentó 4,5 veces. Estamos entendiendo que para crecer necesitamos una ‘Colombia más honesta’.