Las inspecciones a los ascensores, una cuestión obligatoria

Después de los vehículos automotores, se dice que los equipos de circulación vertical son los medios de transporte más usados por el ser humano de manera cotidiana. Es tal el volumen de personas que movilizan cada día estos sistemas al interior de edificios de oficinas, centros comerciales, torres de apartamentos, entre muchos otros espacios, que siempre debe velarse por su óptimo funcionamiento con miras a disminuir el riesgo de cualquier accidente que atente contra la integridad de los pasajeros. Y es que el alto nivel de desgaste al que están expuestos los componentes de estas máquinas a lo largo de su vida útil siempre será considerado un factor de riesgo de falla mecánica, por lo que es una responsabilidad de la administración y/o los propietarios de sistemas de transporte vertical garantizar que el uso del ascensor se da de una forma segura para los usuarios. Precisamente, la capital del país fue pionera en esta materia cuando, en 2011, se estableció que el diagnóstico y la revisión del funcionamiento de esos equipos, con el fin de certificar ciertas condiciones de seguridad, debe realizarse por empresas calificadas y acreditadas por el Organismo Nacional de Acreditación (Onac) según la Norma Técnica Colombiana. Con los años, otras ciudades como Medellín, Cartagena, Cali o Rionegro también han ido adoptando esta disposición. Andrés Mauricio Velasco, jefe de Inspección del Área Técnica del Organismo de Inspecciones Técnicas de Colombia (Oitec), señala que las inspecciones y los mantenimientos tienen implicaciones distintas; "mientras que el mantenimiento incluye reparaciones o cambios de repuestos para que el equipo esté en buenas condiciones, la inspecciones verifican las condiciones de seguridad que le apuntan a una certificación del ascensor", precisa Velasco. Por su parte, Marco Antonio González, gerente de Montajes y Procesos, señala que "lo que hacemos como empresas de inspecciones es verificar a través de una lista de chequeo de unos 174 puntos que examinan todos los sistemas de seguridad del ascensor. Dentro de esta se encuentra todo lo relacionado con el cuarto de motores, todos los sistemas de tracción, la cabina exterior y la cabina interior, el estado del foso del ascensor, así como todos los sistemas de paracaídas y control de velocidades, principalmente". Si al término de la inspección la empresa encargada identifica inconformidades o aspectos negativos que afecten los sistemas de seguridad del ascensor, la norma estipula que, según su gravedad, se le dará un tiempo determinado a la copropiedad para solventar estos hallazgos. Cabe resaltar que, si el descubrimiento tiene implicaciones graves, la empresa tiene potestad de clausurar inmediatamente el equipo de transporte vertical; si los hallazgos son más moderados o leves, el administrador o propietario del ascensor tendrá hasta seis meses (180 días) para contratar un mantenimiento que resuelva el problema y, luego, se deberá volver a llamar al organismo de inspección para certificar el cumplimiento de los aspectos que en primera instancia no se cumplieron. "Por lo general, se encuentran muchas falencias en el sentido de la seguridad. Muchos copropietarios se preocupan más por la parte estética del ascensor de cara a los usuarios, pero descuidan mucho la parte técnica, como el acceso al cuarto de máquinas, iluminación del equipo y todo lo que tiene que ver con controles y dispositivos de emergencia, como el sistema paracaídas", afirma el jefe de Inspección del Área Técnica de Oitec.