Jugadores, hartos del tema Djokovic, piden volver a la normalidad

redacción de deportes - el tiempo @ELTIEMPO
El Abierto de Australia arranca esta noche, bajo la sombra del escándalo de Novak Djokovic, el jugador serbio que, ayer, al cierre de esta edición, no conocía si podía jugar el torneo sin vacunarse contra el covid-19 o sería deportado. Y mientras eso sucedía, los jugadores pedían que el centro de la atención no se siguiera desviando y que de una vez por todas se dejara el tema Djokovic de lado para comenzar a jugar. Nadal, de frente Las principales figuras así lo solicitaron. A todos les llegó la consulta sobre la situación de Djokovic. Un tema que, como un manto, parece cubrir por completo la previa del campeonato y parece haber cansado a los colegas del serbio. "Les digo una cosa. Está más que claro que Novak Djokovic es uno de los mejores jugadores de la historia, sin duda. Pero no hay ningún jugador que sea más importante que un torneo o que el deporte por sí mismo. Los tenistas vienen y van, y después vienen otros jugadores. Ninguno, incluso Roger (Federer), Novak, yo, Björn Borg, que era magnífico en su momento. El tenis sigue. El Abierto de Australia es mucho más importante que cualquier tenista. Si finalmente juega, okey. Si no, el Open será igual de grande, con o sin él", expresó Rafael Nadal. Y agregó: "Creo que esto ha llegado demasiado lejos, se ha complicado más de la cuenta. La verdad es que estoy cansado de esta situación, porque creo que acá lo importante es hablar de nuestro deporte, de tenis. Hemos tenido y tenemos momentos complicados en todo el mundo con la pandemia. Yo sé que el tenis tiene cero importancia si lo comparamos con lo que enfrentamos, con este virus. Ahora, si hay una solución, y esa solución es la vacuna, adelante. Necesitamos estar vacunados, por el bien de todos. A mí, si termina jugando o no, no me afecta en nada, porque yo estoy centrado en lo mío". Nadal, que no es de guardarse las cosas, fue directo al hueso: "A Novak lo respeto como jugador y como persona, le deseo lo mejor, tuve una buena relación con él a lo largo de nuestras carreras, hicimos cosas importantes por el circuito, por nuestras fundaciones, por beneficencia. Espero que todo se clarifique pronto. ¿Su imagen? Bueno, cada uno elige su camino. Yo lo respeto mucho, incluso si no estoy de acuerdo con él en algunas cosas que hizo en las últimas semanas". La preparación habitual de decenas de jugadores para el torneo se vio alterada por el caso de Djokovic. Llegado a Australia, el serbio evitó en una audiencia judicial un primer intento de deportación, y tuvo unos días para entrenarse. Pero este viernes el Gobierno, a través del Ministerio de Inmigración, atacó nuevamente y canceló su visado, dejándolo a las puertas de la deportación. El australiano Alex de Miñaur, una de las figuras locales, también se refirió al tema. "Toda esta situación nos ha sacado el foco a los competidores. Porque estamos para jugar, estamos listos para competir, esperamos tener dos buenas semanas de tenis. Los australianos han tenido que superar muchas cosas, no es ningún secreto. Si quieres venir, tienes que estar doblemente vacunado. Dependía de él, de sus elecciones, de su criterio", expresó. A más de uno, como a Nadal, el tema parece haberlo cansado. "Estoy aquí para hablar de tenis. No voy a mentirles. (Novak) ha estado en todos los medios de comunicación en las últimas semanas. Estoy aquí para hablar de tenis, porque no se ha hablado lo suficiente de tenis, y eso es una pena", evaluó Stefanos Tsitsipas. El ruido que despierta toda la saga de Djokovic llegó también a la rama femenina del Abierto. "Creo que es algo que ya ha llevado mucho, hay que dejarlo atrás, y enfocarse en lo lindo que es empezar un grand slam. Es una situación que podría haberse evitado, como lo hicimos casi todos, con estar vacunados, haciendo todo lo que correspondía para venir a Australia", declaró Garbiñe Muguruza. La japonesa Naomi Osaka, la defensora del título, señaló: "Creo que es una situación desafortunada. Novak es un gran jugador y es un poco triste que algunas personas lo vean de esta manera. Pero también creo que no es algo que dependa de los jugadores de tenis, sino también del Gobierno, de cómo Australia decide manejarlo". Otro ex número uno del mundo, el británico Andy Murray, prefirió mantenerse al margen. "No voy a empezar a golpear a Novak cuando ya está por los suelos", sentenció.