Por alzas de precio, ya no compran como antes

CIUDAD DE MÉXICO, agosto 11 (EL UNIVERSAL).- Carne de res y pollo, jamón, fruta y aguacate son algunos de los productos que han tenido que salir de la mesa de las familias debido al alza de precios, que se ha recrudecido en los últimos meses.



EL UNIVERSAL realizó un recorrido por mercados de Pachuca, Hidalgo; Chilpancingo, Guerrero, y Ciudad Juárez, Chihuahua, donde preguntó a compradores qué medidas se han visto obligados a tomar para que les rinda el dinero ante la inflación.



En Pachuca, amas de casa explicaron que su economía no les permite adquirir comida para toda la semana, "van al día".



"Todo está carísimo", "no nos alcanza" son algunas de las frases que se repiten entre las mujeres. Se quejan de que el aguacate está a 128 pesos y el pollo, a 100. "No hay manera de sobrevivir si apenas tenemos 100 pesos para el gasto", dice Concepción Ramírez.



Explica que en su casa son cinco de familia y lo que ha dejado de comprar es fruta. La carne es sólo dos veces por semana.



Otra compradora, Esther Hernández, reconoce que la situación está muy complicada y explica que ha tenido que priorizar la compra de comida y dejar para el final el pago de servicios. "Primero es la comida; si puedo, ya pago la luz o el teléfono".



Mariana Gutiérrez cuenta que su familia ha tenido que prescindir de pan, fruta y refrescos, que ahora son un lujo. También ahorra en gas, solo usa lo necesario. "Hay que administrarse mejor, de lo contrario no podemos alimentar a la familia", señala.



"Puedo comer tortillas con frijoles". En Chilpancingo, María López recorre el mercado del barrio de San Francisco en busca de los mejores precios. Ahora cada vez que surte su despensa hace lo mismo: pregunta en varios puestos hasta hallar la mejor oferta, aunque muchas veces la diferencia es mínima. María explica la razón: el aumento en los precios cada vez hace más insuficiente su presupuesto.



"Claro que me está afectando el aumento de los precios, pienso que a todos", lamenta.



Hace un año, recuerda, hasta con 800 pesos podía hacer su despensa cada 15 días; ahora gasta hasta mil 500 para los mismos productos o menos.



"He tenido que dejar de comprar unas cosas, como el jamón o embutidos, que para mí no son tan indispensables porque puedo comer tortillas con frijoles y queso, pero jamón ya casi no compro", explica.



También ha tenido que cambiar de marcas, como en el caso del detergente.



"Cambié de detergente porque me costaba una bolsa de kilo unos 25 pesos y ahorita está como a 38, subió mucho".



Ante el aumento del pollo, María comenzó a preparar guisos con verduras como alternativa para sustituir proteínas como pollo, carne o pescado.



"Cada semana sube la despensa". En Ciudad Juárez, Ángel dice que, con el alza en los productos ha tenido que optar por ir a diferentes tiendas para obtener los mejores precios.



"Cada semana veo que sube la despensa, de 100 hasta 400 pesos más", asegura.



Explica que ahora va a los mercados de la zona centro de la Ciudad o la Central de Abastos para comprar carne y pollo, verduras, frutas, queso y huevo, entre otros, donde ha pagado entre 200 y 600 pesos tan sólo en papa, aguacate, cebolla, chile, frutas y queso.



"Eso es de cada semana o 15 días, porque hay cosas que no se acaban, y ahorita estamos en que no llenamos la despensa hasta que se vacía. Sí está muy duro, y a ver cómo se pone más adelante", dice el hombre.



Marcelo Cruz tiene desde hace cinco años un negocio de una frutería en la colonia Barrio Alto en esa frontera y asegura que desde hace un mes se ha notado el impacto en el incremento de los productos que vende.