Nicolás Jarry también se apaga y deja al Chile Open sin su favorito
El chileno sucumbió ante sus propios errores y se despidió en la primera ronda del torneo que organiza su familia tras perder por 5-7, 6-3 y 7-6 (9) ante el argentino Camilo Ugo. "No estoy jugando igual que en los entrenamientos y eso me angustia", admitió.
Fue un apagón. Tal como se cortó la electricidad en buena parte del país, así mismo se sintió la derrota de Nicolás Jarry (45º) ante el argentino Camilo Ugo (69º) en la primera ronda del Chile Open. Fue 5-7, 6-3 y 7-6 (9).
Un apagón anímico, una cachetada dolorosa al rostro más importante del torneo. No es el primer favorito y ni siquiera el mejor chileno, pero es el verdadero local del certamen que organiza su familia y que se juega en el court que lleva el nombre de su abuelo.
Una herida profunda, que se produjo con unos tres mil espectadores que aguantaron con estoicismo el inclemente sol y los más de 30 grados de calor en las tribunas mecano de la cancha principal.
Después de tener dos match points a favor que no fue capaz de capitalizar (el primero, un revés demasiado osado que se le fue ancho), Nicolás Jarry enganchó la pelota con el marco de su raqueta en el momento menos apropiado y la mandó fuera del estadio.
Al otro lado de la red, Ugo se agarró la polera y dejó salir la emoción que acumuló en casi tres horas de batalla. "Vamoooooos" , gritó desaforado, mirando a su banquillo, el único sector del campo que se veía feliz en medio de tanta amargura.
"El primer set lo gané, pero estaba jugando muy mal. En el segundo cometí un error en mi juego de servicio que le dio el break que le sirvió para llevárselo. En el tercero, él jugó bien, pero siento que jugué mejor que él, pero no se me dio...", confesó Jarry con la voz quebrada.
Tal cual. El primer set fue parejo, con Jarry levantando un 0-40 en su peor momento, y que se resolvió con un quiebre sobre el final que despertó a la gente, aunque la expresión facial del local no daba cuenta de la ventaja parcial.
Pero la alegría no duraría demasiado. Pecando siempre de lo mismo, de multiplicar los errores no forzados, Jarry se fue enredando, permitiendo que creciera su rival, que apeló a la receta conocida: estirar los puntos, bajarle la pelota al chileno con su slice y mantener la pelota en juego.
Fue suficiente.
En el tercero, con la gente recuperando la fe, se notó el alza en el juego del chileno, que sacó mejor, pegó más profundo y logró dominar el juego pese a que le costaba acortar los rallies.
Tuvo varias chances de quebrar el saque de Ugo, mientras mantenía el propio con solidez, pero no pudo concretar ese dominio y llegó a un desempate siempre impredecible.
Allí, Jarry llegó a ponerse 5-2 y ya olía la segunda ronda, pero se apagó. Tal como le pasó contra Diego Schwartzman en Buenos Aires, erró un par de tiros fáciles con la presión carcomiéndole la cabeza, falló una volea que pudo dejarlo match point con su saque y, cuando más se necesitaba frialdad, pegó esa derecha que sellaría su destino.
Cruel para él, cruel para el torneo.
"Jugué muy por debajo de lo que estoy entrenando y eso me angustia mucho. Esto pasa cuando uno está sin confianza, porque fuera de la cancha estoy haciendo todo perfecto y no logro repetirlo en la cancha", lamentó el nacional.
"Me sentí mal en el primer set, no pude hacer mi juego, recién en el tercero estuve decente y tuve mis chances, pero no se me dieron y queda seguir viviendo este camino largo", cerró el nacional en una breve conferencia de prensa.
Sus pasos siguientes lo llevarán a Indian Wells, el primer Masters 1000 de la temporada que se juega en California y en el que no será preclasificado, por lo que debutará miércoles o jueves.
Barrios, suspendido
En el partido estelar de la jornada, Tomás Barrios (145º) lo pasaba pésimo ante el argentino Federico Coria (136º), que le había clavado un 6-1 en apenas 36 minutos.
"Mojarra" superaba en todo al chillanejo, que no tenía respuestas y que parecía condenado a una rápida eliminación.
Sin embargo, la decisión del Gobierno de decretar estado de excepción por el corte eléctrico impactó el torneo: la organización debió suspender el partido, que seguirá en el segundo turno de la jornada de hoy, a eso de las 16:00 horas.
7 los puntos de quiebre que tuvo Jarry Fillol frente al trasandino Camilo Ugo. Solamente materializó uno.