Ad portas del verano, advierten por consumo de fármacos para bajar de peso, sin receta o venta ilegal
Sernac e ISP llaman a usar guía médica y a comprar en comercio formal. Expertos explican que mal uso puede ocasionar incluso aumento de tallas.
La reducción del sobrepeso o la obesidad es la meta de muchos países para tener tasas adecuadas de peso en sus habitantes. Se trata también de un tema de interés para las personas que buscan distintos métodos, desde la alimentación sana, el ejercicio y la medicación, para lograr el objetivo de bajar unas cuantas tallas.
Sin embargo, llegar a un peso normal no es fácil y muchos recurren a métodos como el consumo de medicamentos riesgosos sin receta, o la compra de fármacos que no tienen registro sanitario o que se venden en el comercio callejero.
En ese contexto, el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) y el Instituto de Salud Pública (ISP) hicieron un llamado y advertencia a la ciudadanía sobre los riesgos de comprar y consumir este tipo de remedios.
Los fármacos que se comercializan fuera del comercio formal y por internet o redes sociales se consideran productos falsificados. "Aduanas ha reportado incautaciones de fármacos etiquetados como Sentir y Elvenir, que debieran contener fentermina, pero que cuyos análisis demostraron que no contenían los ingredientes declarados, exponiendo así a las personas a productos adulterados y falsificados", dice el Sernac a "El Mercurio".
Los reclamos más frecuentes ante la entidad se relacionan con cobros indebidos, quiebres de stock y diferencias de precios.
Riesgos sanitarios
Los expertos alertan que la automedicación y la compra informal son peligrosas, ya que los efectos secundarios varían según el fármaco y la persona.
Fanny Petermann-Rocha, académica de la Facultad de Medicina de la U. Diego Portales, plantea que "los riesgos existen a diferentes niveles. Por ejemplo, a nivel colectivo, la falta de regulación hace que algunos medicamentos tengan un mayor costo que en el mercado oficial, y que aquellas personas que sí los requieran y estén bajo tratamiento médico no puedan acceder por falta de stock . No obstante, a nivel individual está el riesgo de no control en su uso, lo cual podría generar complicaciones".
Afirma que "el mal uso podría generar problemas a nivel hepático, renal o interacciones entre otros fármacos que la persona también esté consumiendo. A su vez, cuando alguien baja de peso usando estos fármacos y sin supervisión ni un programa de ejercicio guiado, por ejemplo, por cada kilo que pierde no solo pierde grasa corporal, sino también músculo. Lamentablemente, tras abandonar el medicamento, suele haber una recuperación rápida de ese peso, pero lo que se recupera es solo grasa corporal y no musculatura si no hay un entrenamiento físico detrás".
Además, Heriberto García, director de la carrera Química y Farmacia de la U. del Desarrollo, precisa que "hay medicamentos que se venden con receta médica cheque, un tipo de receta que controla qué médico prescribe el fármaco, quién lo adquiere, quién es el paciente y qué farmacéutico lo dispensa, todo lo cual se registra en libros y se informa a la autoridad sanitaria, dado que son del tipo anfetamínico, que son precursores de drogas ilícitas".
"La compra por canales informales expone a las y los consumidores a estafas, pérdida de dinero y vulneración de sus derechos, ya que en la práctica se enfrentan a un mercado de productos falsificados, sin trazabilidad ni control sanitario", añade el Sernac.
Mientras, Petermann-Rocha llama a "siempre tener supervisión de un equipo de salud completo. Un medicamento podría ayudar a partir, pero por si solo no generará hábito y las personas requieren hábitos a largo plazo para mantener un peso saludable".
StockEl Sernac ha detectado escasez de productos como Ozempic, lo que afecta a diabéticos.