Germán Barcala, presidente de Wanderers, previo a elecciones: Reconozco que fue una mala gestión deportiva

Este viernes, Germán Barcala cierra su mandato como presidente de Wanderers luego de un año y medio. Justamente por un cambio en los estatutos es que su tiempo como titular de los Bohemios se acortó, ya que se votó en asamblea de socios pasar a que las elecciones se realicen a fin de año para facilitar a las nuevas directivas en la toma de decisiones en relación al armado del plantel y los DT.


En su mandato varios dirigentes de su propia agrupación renunciaron y fue cuestionado por un grupo de hinchas por algunas decisiones. El club está sumergido en una crisis deportiva y económica, con el equipo al borde del precipicio de la Segunda División y con adeudos con funcionarios y jugadores. De cómo se sale de este momento y de lo que visualiza el día de las elecciones, Barcala lo habla en esta entrevista con Ovación.

- ¿Qué análisis hacés de tu presidencia?

- Fue un periodo complejo. Todos conocemos que venimos de una elección de cinco listas. Esa división que hubo en esa elección siguió un poquito más en la gestión, en el comienzo, y eso condicionó ciertas cosas. Fue complejo y lamentablemente no acompañó lo deportivo. Fue un periodo difícil, pero acá lo estamos terminando y siempre pensando en lo mejor para el club.

- ¿Qué fue lo más difícil?

- Pasaron temas de salud, con jugadores, tuve de todo. La tribuna, que fue un tema complejo; un proyecto que lo heredamos del período anterior y que nos generó muchas dificultades, mucho tiempo, dificultades financieras porque estuvimos un año sin poder habilitarla y eso nos generó tener que pagar sus costos sin poder recaudar. Fue un proyecto que nació con algunas dificultades, con carencias que nos complicaron la gestión. Lamentablemente también tuvimos una mala transición porque no hubo transición en el caso nuestro y alguna dificultad también interna, de gente que se fue.

- Hablabas de algunas personas que empezaron, y que te acompañaron a vos en las elecciones, pero que después se bajaron; ¿eso por qué se dio?, ¿te dolió?

- No es que me haya dolido, yo creo que eso es un daño al club, más que personal. Si bien me tocó a mí como presidente, es un daño al club. Creo que uno de los mayores daños que tiene Wanderers en su interna es cuando hay una discrepancia o hay dificultades, alguien se enoja y se va. Es como que me enojo, agarro la pelota y me voy. Me parece que hay un poquito de falta de madurez, en lugar de quedarse y afrontar un poco las dificultades. Por ahí, en otras instituciones, cuando hay dificultades la gente tiende a unirse más en la adversidad. En el caso de Wanderers, una de las dificultades que tenemos es que mucha gente, o algunos, deciden dejar el barco cuando hay dificultades, deciden enojarse, irse y eso al club no le hace bien. Yo respeto mucho a aquellos que están desde el comienzo.

- ¿Te sentiste solo?

- Sí, en algún momento me sentí bastante solo, pero cuando uno asume un compromiso hay que seguirlo hasta las últimas consecuencias y para mí era más fácil dar un paso al costado, pero nunca estuvo en mi cabeza porque fue un gran honor haber sido electo presidente y dentro de las dificultades que tuvimos había que sacar esto adelante.

- ¿Fue un error no haber manejado la situación de Mauricio Nanni de otra forma?, ¿no haber puesto otra persona para ayudarlo?

- En esto hay muchas opiniones, en lo personal, no. Nosotros incorporamos a Martín Galván como secretario deportivo para hacer toda la tarea operativa que Mauricio no podía hacer físicamente, porque no estaba, e hizo una tarea muy buena. Mauricio estaba con un tema de enfermedad, alejado, pero también trabajando desde su lugar colaborando, ayudando, pero sin la posibilidad de estar operativamente presente. Nunca analicé destituirlo. Primero porque tengo un concepto bueno de él, hace ocho años que está y obviamente errores comete, como hemos cometido todos, pero si hago un balance de Mauricio a mí me da positivo. Además, en el momento complicado de salud que estaba pasando, me pareció inoportuno y de mal gusto, por eso yo lo mantengo.

- ¿A qué le atribuís que Wanderers haya tenido cuatro DT en el año y que esté hoy en una situación dramática en el descenso?

- Por muchas causas. No es Nanni la causa, aunque puede ser parte de ella, puede ser parte que este presidente se haya equivocado en contratación de algunos jugadores y que se haya equivocado en varias cosas, seguramente fue así y yo no tengo problema en decirlo. Quien más hace cosas, más se puede equivocar. Lo de los DT, es verdad. Yo diría que fueron tres y medio porque el caso Martínez fue un interinato que duró un poquito más. Yo, las veces que tuve que cambiar, estuve convencido. De hecho, en el caso de Pacheco me han criticado porque le renové en diciembre y porque siguió; en fútbol todo es opinable y con el diario del lunes es mucho más sencillo juzgar al que se equivocó. Tratamos siempre de hacer lo mejor, de tener los mejores DT, el plantel más competitivo posible, pero lamentablemente el resultado no se dio. Además hay otras causas. Hubo muchas lesiones y son cosas que nos llevaban a este resultado deportivo que fue realmente muy malo. No hace falta que me critiquen porque soy el primero en reconocerlo, no hay discusión en ese tema, lamentablemente fue una muy mala gestión deportiva.

- Se buscaron inversores para que ayuden a Wanderers de distintas formas, pero no se pudieron concretar, ¿eso quedó en el debe?

- Sí, queda en el debe porque eso lleva mucho tiempo. Iniciamos un camino que hay que continuar. Nosotros presentamos un documento que tiene que ver con la inserción de Wanderers en el mundo, nos relacionamos con clubes allegados como River argentino. Tal vez hoy la SAD, políticamente e internamente no salga, pero Wanderers tiene que tener una alianza de algún tipo y eso lo hemos hablado. Wanderers necesita abrirse al mundo, tener inversiones, tener oportunidades para que los jugadores vengan y para que vayan, para hacer un intercambio más sano. Tuve una reunión con los dos candidatos porque estamos haciendo una transición que es ejemplar. Hemos tenido un contacto permanente estos últimos días con los dos, con temas que están pasando en el día a día. El club es uno solo y más allá de diferencias que uno pueda tener con otras listas, que es normal, hemos hablado siempre de frente y hemos discutido, pero poniendo al club por encima de todo.

- Desde la oposición manejaron discrepancias y falta de transparencia en la negociación de Nicolás Fonseca; ¿qué fue lo que pasó?

- El que diga en la oposición que no hay transparencia sería bueno que me lo diga personalmente. Fue una situación límite que se explicó varias veces y no se quiso entender. Lo que le corresponde a Wanderers está documentado y cubierto, y nos quedamos con el 40% de la ficha. Si nos poníamos el balde y cerrábamos las puertas, en River no tenía lugar Nicolás, no iba al León y nosotros no cobrábamos nada. Fue muy polémico, pero a veces hay que tomar decisiones y nos pareció que era lo mejor. Es un convenio privado, ya pagaron 100.000 dólares, hay atrasados 200.000 que tienen que pagar ahora él y su representante Daniel Fonseca y quedan 500.000 pendientes. Ellos reconocen la deuda

- También te acusan que sacaste un préstamo a tu nombre con un prestamista privado a una tasa muy alta, por un dinero utilizado para Wanderers y que el tema no pasó por directiva; ¿qué aclaración podés hacer?

- Lo aclaré en directiva. En la directiva se había votado la posibilidad de pedir un préstamo a Tenfield, pero la gestión no prosperó y bueno, al no prosperar y a veces en la desesperación por cubrir el presupuesto y conseguir el dinero, se recurrió a alguien que ya se había recurrido, o sea que no es nuevo, no es un prestamista que haya pedido Barcala sino que ya se había recurrido antes en Wanderers. Obviamente que la tasa es más alta de lo habitual pero no había otra opción y eso se habló después en directiva. Yo lo expliqué en una asamblea y creo que no quedaron dudas que fue un dinero que entró para Wanderers. Tal vez haya habido una falta de un procedimiento, yo lo reconozco, pero a veces cuando estás en el día a día, en la desesperación de cubrir todo y de cumplir puedes caer en eso, pero yo estoy muy tranquilo. No existió falta de honestidad ni de transparencia. A veces cuando estás solo y no encontrás soluciones recurrís a algo que no es lo más adecuado.