Las claves de Tadej Pogacar para ganar el segundo Tour
lisandro rengifo - redactor de el tiempo @lisandroabel
Tadej Pogacar es el líder del Tour de Francia, tiene una diferencia considerable y cómoda frente a los demás rivales, que buscan el mejor resultado en la carrera, pero no está con los brazos cruzados ni de acá en adelante se acostará en una hamaca a ver cómo transcurre el final
lisandro rengifo - redactor de el tiempo @lisandroabel
Tadej Pogacar es el líder del Tour de Francia, tiene una diferencia considerable y cómoda frente a los demás rivales, que buscan el mejor resultado en la carrera, pero no está con los brazos cruzados ni de acá en adelante se acostará en una hamaca a ver cómo transcurre el final. El corredor esloveno aventaja a Rigoberto Urán en 5 minutos y 18 segundos, al danés Jonas Vingegaard en 5 minutos y 38 segundos y a Ríchard Carapaz en 5 minutos 33 segundos, para hablar de los más cercanos, pero eso no quiere decir que haya sentenciado el Tour. Claro, la tiene más fácil que los líderes en años anteriores, pero el Tour no perdona un error, tampoco un desperfecto mecánico ni mucho menos una caída, o que lo diga Primoz Roglic, que se fue de la competencia, tras el golpe que se dio en la tercera etapa. El líder del UAE Emirates no tuvo una buena etapa el miércoles pasado, pues en el ascenso hacia el Mont Ventoux tuvo una minicrisis, no pudo seguirle el paso a Vingegaard y tuvo problemas. "No he podido seguirlo, iba muy fuerte, era demasiado para mí y tuve un mal momento", manifestó ese día. Lo anterior quiere decir que si bien está fuerte, ha sentido el rigor de su esfuerzo, no se puede confiar y no está tan sobrado como se dice. Ayer, en la etapa 12, estuvo tranquilo y analizó lo que viene. Advirtió que la diferencia es buena y se dedicará a cuidarla, pero es un corredor ambicioso y, si no pasa nada extraordinario, llegará a París con mucho más tiempo que sus contrincantes. Puede dedicarse a ir a la defensiva, pero es un ciclista ambicioso, al que le gusta ganar, y si bien tendrá días para poner el freno y dejar que los demás hagan su carrera por buscar el podio, es evidente que no se va a quedar quieto. "El primer objetivo es defender el maillot amarillo, pero nunca se sabe. Si me siento bien y veo una oportunidad de ganar más tiempo, no la voy a dejar escapar", señaló el corredor de 22 años. Así, debe tener cuidado con las fugas. Controlar es lo clave y conocer quiénes son los que se van del lote con el fin de figurar. No se puede confiar y dejar ir a uno que esté en el top 10, puede hacer la diferencia y ponerlo contra la pared. Faltan jornadas duras, como la del domingo, en Andorra, y dos finales en alto, el miércoles y el jueves, fracciones ideales para manejar la diferencia. Sin embargo, la contrarreloj del sábado 17 de julio, penúltimo día de carrera, Pogacar la hará con tranquilidad, pero les sacará más tiempo a sus rivales, porque va mejor que ellos. El panorama para el líder es muy bueno de cara al final. Desde la primera semana se quedó sin rivales para pelear por el título, pero eso no quiere decir que se haya dormido, al contrario, debe de seguir pedaleando, con los ojos puestos en los rivales, cerrando toda opción de descuento y librando diariamente los peligros que se puedan encontrar en la carretera.