Lanco recibe el 2020 con ambiciosos planes de expansión
Con miras a expandir su presencia en los Estados Unidos a lo largo del Golfo de México, construir tres nuevas plantas de manufactura en Latinoamérica a un costo aproximado de $20 millones, e integrar nuevas tecnologías que faciliten la producción, distribución y venta de sus productos en más de diez países, antes de que culmine el 2020, Lanco apuesta a su experimentado equipo de científicos, tecnólogos y vendedores para definir los próximos 40 años de la empresa netamente puertorriqueña
Con miras a expandir su presencia en los Estados Unidos a lo largo del Golfo de México, construir tres nuevas plantas de manufactura en Latinoamérica a un costo aproximado de $20 millones, e integrar nuevas tecnologías que faciliten la producción, distribución y venta de sus productos en más de diez países, antes de que culmine el 2020, Lanco apuesta a su experimentado equipo de científicos, tecnólogos y vendedores para definir los próximos 40 años de la empresa netamente puertorriqueña.
A estos esfuerzos, la compañía especializada en la manufactura de selladores y pinturas ideales para el clima tropical de Puerto Rico y sus vecinos en el trópico, planea dedicar más de $20 millones al inicio de la década.
Así lo explicó el presidente de Lanco en Estados Unidos, Juan Pablo Gaztambide, quien se mudó al estado de Florida en el 2017 para identificar nuevos mercados a lo largo del Golfo de México. Desde entonces, Gaztambide ha logrado distribuir sus selladores de techo en 162 tiendas Home Depot en Florida y otras 20 en Arizona y Nuevo México.
Nuevos mercados al norte
"Estados Unidos es un mercado tan competitivo, (en el) que realmente hay que apostarles a los nichos. Nosotros sabemos que nuestro sellador de techo está más que probado por todas las inclemencias del tiempo que hemos sobrevivido en Puerto Rico y otras islas del Caribe. Ahí está casi la mitad de nuestro negocio en Estados Unidos, pero sabemos que podemos dar más", afirmó Gaztambide, quien espera entrar en otras 40 tiendas del gigante de la ferretería en los estados fronterizos para el verano.
Recientemente, su equipo aseguró a los parques de Disney y Universal en Orlando, dos de los clientes comerciales más grandes en la Florida Central. "Aquí estamos hablando de pintura también, así que esto nos ha puesto a competir de tú a tú con Sherwin Williams y PPG (Glidden), algo que no hubiera sido posible si nuestros productos no hubieran sido diseñados para aguantar todo lo que nos tira la naturaleza en Puerto Rico", añadió el boricua.
De cara al resto de la década, Gaztambide espera apalancar su expansión al estado de Texas a la reputación que se ha ganado Lanco con los contratistas externos en los parques de diversión en Florida Central.
"Texas es el mercado más grande de selladores de techo y nosotros tenemos dos ventajas competitivas: podemos servir a este mercado, cómodamente, desde nuestra planta de manufactura en Florida y nuestros productos están requeteprobados en el clima de Puerto Rico", sentenció.
Expansión en Latinoamérica
Con raíces en San Lorenzo, Puerto Rico, donde produce miles de variaciones de sus selladores, pinturas, pegamentos y otros productos con destino a más de una decena de países en el continente americano, Lanco ha usado su marca y las de sus distribuidores para proporcionar su expansión en Latinoamérica.
Además de Puerto Rico y Florida, Lanco cuenta con plantas de manufactura en Colombia, Costa Rica, República Dominicana y Nicaragua. A esta lista, su vicepresidente ejecutivo, Francisco Viejo, espera añadir a Jamaica y Chile antes de que culmine el 2020.
"En Jamaica y Chile ya tenemos una presencia fuerte. Allí tenemos centros de distribución, pero la demanda ya está llegando a un nivel que es lógico para nosotros construir plantas de manufactura en esos mercados", explicó Viejo, quien actualmente manufactura en Puerto Rico la gran mayoría de los productos que exporta a esos dos mercados.
A esos se suman Perú, Panamá, Anguila, Antigua y Barbados, Aruba, Islas Vírgenes, Bahamas y otras islas caribeñas a donde Lanco exporta el 15% de su producción boricua.
De hecho, durante una visita al centro de distribución de Lanco en San Lorenzo, Negocios evidenció que uno de los camiones que se alistaba para salir de allí iba lleno de mercancía para el mercado chileno.
"Cuando la demanda ya es tanta que no puedo manejarla con esta logística de distribución, el paso lógico es montar una planta de manufactura más cerca a esos clientes", añadió Viejo, quien se unió al equipo luego de fungir varios años como abogado de Blanco Group, la empresa matriz de Lanco.
En Chile, Lanco lleva varios años distribuyendo sus productos a través de las 70 tiendas de Sodimac, el homólogo chileno de Home Depot, las cuales, a juicio de Viejo, ejemplifican la entrada de la empresa boricua a un nuevo mercado.
"Nosotros visitamos las tiendas, hablamos con los ferreteros, nos traemos sus productos y los ponemos a prueba para ver cuáles son nuestras ventajas competitivas antes de hacer nuestras apuestas a cada mercado", señaló el abogado, que tiene un arsenal de casi 3,000 productos para hacerle la competencia a cualquier marca.
Al igual que hace con Walmart en Puerto Rico bajo la marca Color Place, Lanco ha probado el mercado chileno bajo la etiqueta Kölor de Sodimac. Mientras tanto, ha ido introduciendo su propia marca poco a poco a un nivel más alto de calidad y de precio.
Este proceso, sostuvo Viejo, será la clave para inaugurar plantas de manufactura en Kingston, Jamaica y en Santiago de Chile, además de otra que está en planes para Guatemala, a un costo aproximado que supera los $20 millones, antes del año nuevo.
Puerto Rico, piedra angular
Aunque la empresa tiene operaciones de manufactura, distribución o investigación en todos los mercados que opera, después de 42 años en el negocio, Puerto Rico sigue siendo el centro de la acción a nivel internacional con más de 300 de los casi 2,000 empleados de Lanco a nivel global.
Luego del huracán María, Lanco invirtió cerca de $2 millones para renovar sus oficinas centrales en San Lorenzo y establecer un sistema energético de respaldo para los casi diez edificios en su campus central.
Mientras caminaba por las filas casi interminables de su centro de distribución, de camino al laboratorio de investigación y desarrollo de nuevos productos, Viejo resaltaba que Lanco fue el primero en el mercado en lanzar pinturas antibacteriales, aislantes de calor y otras anticorrosivas a base de agua.
"La pintura antibacterial la desarrollamos porque no las pidieron para hospitales y centros de cuido en Nicaragua. La pintura anticorrosiva a base de agua, no de aceite, surgió con las restricciones ambientales, porque mientras más restricciones se le impone a la industria de la construcción, más hay que innovar", dijo el experto en revestimiento de superficies, Javier Fernández.
Usando diferentes aditivos, que evitan el crecimiento de hongos o se expanden para disipar el calor de las paredes, entre otros, la empresa multinacional ha logrado mantenerse a la vanguardia de la tecnología bajo la tutela del químico boricua Víctor Hernández, quien ha laborado en San Lorenzo desde que la familia Blanco fundó la empresa en 1978.
"Siempre estamos buscando nuevas materias primas que sean más eficientes, satisfaciendo las necesidades de (reducir) costos, sin sacrificar el rendimiento de los productos", explicó Hernández, quien ponía uno de sus selladores de poliuretano a competir con una reconocida marca estadounidense y no le temblaba la voz cuando decía que "nuestro producto hace lo mismo por la mitad del costo".
En el lado de las ventas, el director de Tecnología e Innovación de Lanco, Lisandro Quiñones, pretende acortar a solo segundos el tiempo que tarda uno de sus vendedores en buscar el color que desea el consumidor para brincar rápidamente a lo que diferencia a la marca de sus competidores: el trabajo de Hernández y su equipo multinacional de investigadores.
Utilizando sensores de color en sus puntos de venta, conectados a una ampliación móvil equipada con toda la librería de colores de Lanco, Quiñones puede escanear el color de cualquier superficie (típicamente una página de revista) y parearlo a una pintura Lanco.
"Sin tecnología, este proceso depende mucho del conocimiento del vendedor y de la imaginación del consumidor, pero todo esto es data que puede manejar la aplicación en solo segundos. Se lo delegas a la tecnología, que también te ofrece combinaciones de colores para el cliente, y así te puedes enfocar en los otros beneficios de nuestros productos", explicó Quiñones, quien también lidera la transición informática de toda la empresa a la nube.
El próximo paso, dijo el tecnólogo, es integrar estas tecnologías al resto de la cadena de distribución para "llevarnos a un nivel de competencia muy superior porque el tiempo que demoraríamos en completar la venta es mucho menor. Estamos reinventado el proceso de venta".
Pasados sus 40 años en el mercado, "estos son los cambios que tenemos que hacer en Lanco para continuar poniendo el nombre de Puerto Rico en alto por los próximos 40 años más", sentenció Viejo.