El Comercio, Perú
2 de abril de 2024
Modus operandi. Asociaciones afilian a choferes y les ?facilitan? acceso a zonas exclusivas del terminal aéreo. Conductores contratan a personas, ubicadas en la Av. Faucett, para que ingresen los vehículos y eviten pagar parqueo, lo que genera congestiones en el carril para recoger pasajeros.
Por JUanPAbloLeón
En el aeropuerto Jorge Chávez, las asociaciones de taxis no autorizados que compiten con las empresas oficiales son una amenaza para la seguridad de los pasajeros. Como reveló El Comercio, estos grupos cuentan con unos 200 choferes con antecedentes policiales y procesos fiscales por delitos como robo, secuestro y homicidio.
Desde el parqueo buscan a sus clientes y obstruyen las vías de acceso. También han tomado casi 300 metros cuadrados en la parte exterior (Av. Elmer Faucett). Están afiliados a sus ?gremios? a través de pagos diarios y categorías que les dan prioridad, y utilizan la intimidación para controlar el área.
Estas asociaciones, una vez efectuado el primer pago de ?inscripción?, que va desde S/1.500 hasta los US$8.000, entregan a los choferes un fotocheck y una camisa para dar una imagen de legitimidad, aunque el 70% de ellos no tiene autorización, según la ATU. Se trata de asociaciones inscritas ante los Registros Públicos para dar apariencia de formalidad. A partir de ese primer abono, están obligados a pagar cupos diarios.
?Un espacio tomado?
Una modalidad es emplear jaladores que generan desorden. El Comercio detectó que taxistas contratan a conductores ?ubicados en la Av. Faucett? que ingresan y retiran sus vehículos por la vía libre, creando tráfico de hasta 20 minutos. Esta rotación por la vía libre les permite evadir el pago de estacionamiento (S/7 la hora o fracción).
La zona exterior del aeropuerto ha sido tomada como ?base? donde estos choferes tercerizados esperan el aviso para ingresar con alguno de los autos asociados.
Estas prácticas no solo confunden a los pasajeros, sino que también representan un riesgo para su seguridad. La falta de filtros de seguridad en la afiliación de estos taxistas permite la presencia de individuos con antecedentes delictivos. A pesar de la presencia policial, la falta de un código de conducta y normativa punitiva dificulta la intervención contra estas mafias. Sin autoridad en las afueras del terminal, las asociaciones informales trabajan sin restricciones.
?Lotizan estacionamiento?
De casi 800 taxistas que operan en el aeropuerto, alrededor de 280 de ellos desembolsan desde S/20 hasta S/40 diarios a las asociaciones que controlan tres áreas de estacionamiento; es decir, lotizan la vía libre de parqueo por unos S/5.600 al día o S/170.000 al mes.
El Comercio accedió al testimonio de una persona que se hizo pasar como postulante a taxista. Al chofer se le piden S/22 diarios para operar en una de las zonas tomadas, y que un chofer ingrese su carro permanentemente y así evitar el pago de parqueo. El sujeto que se dirige al postulante es Erwin López, gerente de la empresa Los Doce Inversiones S.A.C., quien tiene historial penal.
El precio que pagan estos taxistas por un lugar para atraer clientes depende de cuán cerca estén de los viajeros. La primera zona les permite tener un primer acceso a los pasajeros, y deben pagar un precio más alto.
Un diálogo con otro representante revela que a los postulantes les piden hasta S/1.500 anuales, aparte del pago semanal o diario para contratar a choferes desconocidos que ingresan los autos.
Tras ellos se instala otro grupo que enfrenta amenazas y hasta agresiones si osa adelantarse a los de la zona 1. Mientras tanto, los taxistas de la tercera línea ofrecen tarifas más bajas.
Una cuarta zona, entre ambas áreas de llegada, se convierte en el punto de espera para los momentos de mayor tráfico de vuelos.
Responsabilidades
En abril del 2022, LAP denunció actos de desorden y bloqueo de vías de taxistas informales. Ositrán aprobó reglas de seguridad en enero del 2023, con implementación para marzo.
Sin embargo, en febrero de ese año, protestas de estos grupos desafiaron las medidas, retrasando su efectividad hasta diciembre del 2023. Meses después, LAP se vio envuelta en negociaciones con asociaciones de taxis del Callao.
Aunque se lograron ajustes, el desorden en el aeropuerto persiste. La marcha blanca se extendió hasta enero del 2024.
