Barajas, el diamante de la gimnasia que va a París

Ángel Barajas logró para Colombia el cupo 49 para los Juegos Olímpicos de París 2024, en la competencia de barras paralelas tras su participación en la Copa Mundo de Gimnasia de Doha (Catar). El joven talento de 17 años terminó de primero en el escalafón clasificatorio en la disciplina y selló su boleto a París. Barajas tenía la primera opción, lideraba la prueba, pero ni él ni Jossimar Calvo clasificaron a la final y tocó esperar a la definición de la competencia para saber si se obtenía o no la casilla. Ángel está en la gimnasia desde los cuatro años. Llegó porque un vecino le dijo a su mamá que él tenía mucho talento para ese deporte. "Hacía medialunas desde muy pequeño, me trepaba a los techos y un vecino le dijo a mi mamá que me llevara al gimnasio, y ella le hizo caso. Fui, pero no me gustó. Eran puras niñas las que entrenaban y por eso no volví. Luego regresé y seguí. Me acuerdo que fui al gimnasio Eustorgio Colmenares de Cúcuta, a donde el profesor Jairo Ruiz", le contó Barajas a EL TIEMPO. Nació el 12 de agosto de 2006 en Cúcuta. Sus padres son Angélica María Vivas y Wilson Barajas, y sus hermanos mayores se llaman Jeison y Youri. Wilson no vive con ellos. Desde que Ángel tenía 6 años se fue de la casa y sus hermanos tuvieron que trabajar para ayudar en el hogar. "No vivo con mi papá y a mis hermanos les tocó trabajar desde los 13 años. Hemos superado muchos y esta es la hora de seguir adelante, de no bajar la guardia, pues lo que quiero es ayudarlos", contó Ángel. Recuerda que su niñez no fue fácil porque el dinero escaseaba. Nunca les faltó nada, tenían comida y vivienda, pero la plata no les alcanzaba para solventar necesidades. Vivían en la casa de la abuela Nubia y le tocaba levantarse temprano para ir a entrenar. Llega a las 6:15 de la mañana, hace su terapia y de 7 a 11:45 está en su práctica. Almuerza y vuelve al entrenamiento hasta las 3 p. m. Termina extenuado, va a la casa, estudia y se va a dormir, tarea que no es difícil para él, pues su día es muy duro. Los sacrificios son muchos, y la exigencia de los entrenamientos lo es más. Barajas tiene claro que eso fue lo que escogió, que tiene un futuro inmenso para sacar a su familia adelante, pero ha tenido problemas. "He pensado retirarme porque no tengo una vida como las demás personas de mi edad. Todo es muy estricto, pero lo supero. Sigo empeñado en conseguir buenos resultados, en mejorar el nivel, entiendo que es mi futuro", contó. Angélica dice que la afición de su hijo por la gimnasia nació de la televisión y que desde niño le gustaba tirarse desde el clóset de la habitación a la cama. "Veía lo que hacía Lazy Town, ese programa de la televisión, e imitaba todos los saltos. Se tiraba desde el clóset a la cama, pero nunca le pasó nada", afirmó la mamá de Ángel, quien años atrás se ganaba la vida arreglando uñas, luego atendiendo una panadería, hasta que su mamá le dijo que se dedicara a los hijos. Ángel venía de ganar medalla de bronce en la Copa Mundo de El Cairo en la barra fija y ocupó el tercer puesto en paralelas en Bakú. En el Mundial juvenil del 2023 se colgó el oro en la competencia de suelo y barras paralelas, fue plata en la general individual y bronce en barra fija. Angélica elogia a su hijo, como toda mamá, y le brillan los ojos cuando cuenta la forma como Barajas ayuda en la casa. "Ya se hace cargo de sus gastos personales, y entonces uno se quita un peso de encima. La alimentación de él es diferente. Hay que comprar las vitaminas para su deporte, la hidratación, y vive con hambre", señaló Angélica. Ruiz es el hombre que lo ha formado. El DT tiene claro que el futuro de la gimnasia del país está en Ángel, aunque sigue creyendo en Calvo. "La rutina diaria que hace lo dice todo. Es disciplinado, y cada vez veo que va superando sus rutinas", comentó Ruiz. Ángel Barajas sabe que sus sacrificios no han sido en vano y que ahora tiene un gran reto: los Olímpicos. "Me esfuerzo todos los días porque me gustaría comprar una casa propia, ayudar a mi familia como ellos me han ayudado", sentenció el nuevo clasificado a París. Lisandro Rengifo
Logró cupo Olímpico en las barras paralelas en la Copa Mundo de Doha (Catar). Llegó a este deporte

por curiosidad y aunque ha pensado en retirarse, sigue porque quiere sacar adelante a su familia.