Las siete condiciones para un mayor crecimiento que pidió priorizar el presidente de la CPC

El presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Ricardo Mewes, dedicó buena parte de su discurso en Enade a presentar -con datos oficiales- los hitos que condujeron a un deterioro en la calidad de vida de los chilenos que preocupa al empresariado.
Lo hizo con una analogía atlética, sobre la carrera que llevaría a Chile a convertirse en un país desarrollado: "Lo que en algún momento nos parecía una carrera de 400 metros planos, se fue transformando en una llena de obstáculos y donde la meta ya no se ve con claridad". Para Mewes, el cambio de escenario tuvo un punto de inflexión claro, si se observa el promedio de crecimiento de 4,8% que tuvo la economía chilena entre 2004 y 2013, para luego decaer a tan solo 1,9% anual entre 2014 y 2023.
El líder del gran empresariado también puso énfasis en las áreas a priorizar para revertir la carrera de obstáculos, pero defendió el derecho de los empresarios a "hacer oír nuestra voz, en tiempos en que algunos han querido desvirtuar el aporte esencial de la actividad privada".
El "estado del arte"
Para Mewes, si se quiere impulsar el crecimiento y la inversión, "deben darse ciertas condiciones mínimas que desde hace un tiempo se han venido debilitando en nuestro país".
Mencionó, por ejemplo, que en materia de seguridad, "los delitos violentos en general alcanzan máximos históricos según datos de Carabineros de Chile", las listas de espera en salud suman 2,7 millones de personas, y que un 96% de los alumnos de primero básico no conocen las letras del alfabeto.
En materia económica, mencionó que "nos falta por recuperar 190.000 puestos de trabajo para alcanzar la tasa de ocupación prepandemia", que las pensiones siguen siendo bajas y que el déficit habitacional "aumentó un 13% desde 2017, lo que implica que hoy se necesita 1.000.000 de nuevas viviendas".
Pero la mayor preocupación es el crecimiento, dijo, que "ha sido muy escaso y enfrentamos una pausa de proyectos de inversión de gran envergadura". Por esa debilidad de la inversión, dijo, es "indesmentible" que el crecimiento tendencial de la economía apenas se ubica en torno al 2%.
Los obstáculos
A su juicio, hay ciertos hitos que se constituyeron como los principales "obstáculos" en la carrera al desarrollo. "En 2014 se aprobó una reforma tributaria que marcó un antes y un después en materia de inversión y crecimiento. Al año siguiente, se cambió el sistema electoral, produciendo una fragmentación que impide grandes acuerdos sociales, proinversión y crecimiento. Luego vinieron el estallido y la pandemia, con sus desafortunados efectos. Tuvimos que "enfrentar dos intentos fallidos de procesos constitucionales, que llenaron al país de incertidumbre", recordó.
Pero también asignó responsabilidad al debate reciente: "Comenzaron a diseñarse reformas económicas y sociales refundacionales, las principales, en materia tributaria y de pensiones".
Los siete ejes
Pese a la visión crítica de Mewes, también delimitó un camino a seguir para habilitar un mayor crecimiento, basado en siete puntos.
El primer facilitador, dijo, es la seguridad: "La violencia es un impuesto altísimo que hoy estamos pagando todos, personas y empresas. Es deber del Estado bajar este impuesto de manera urgente".
También apuntó al rol del Estado, que debe ser ágil, eficiente, transparente y profesional", además de actuar con un rol "menos productor y más facilitador, que acompañe y permita al sector privado desplegar todo su potencial, sin minimizarlo, y menos excluirlo". En la misma línea, mencionó que la certeza jurídica juega un rol gravitante, sobre todo, en materia de permisos para la inversión.
Asimismo, sostuvo que la competitividad tributaria es esencial, y aunque los gremios han sido propositivos, "sería tremendamente perjudicial para el crecimiento económico una reforma tributaria con alza de impuestos".
Mewes dijo esperar que la conversación tributaria cambie, "desde la recaudación hacia los incentivos al crecimiento".
Como últimos puntos mencionó los desafíos en desarrollar capital humano, aprovechar las ventajas comparativas en la industria de energías limpias y contar con "un sistema político que dé gobernabilidad".