Un clásico blaugrana: Barcelona silencia el Bernabéu y golea al Real Madrid

F ue una paliza. Barcelona se floreó en el Santiago Bernabéu y goleó por 4-0 al Real Madrid en una nueva edición del clásico español, en que Robert Lewandowski se erigió como gran figura.
Se esperaba un partidazo, especialmente tras los duelos de ambos en Champions League, con sendas goleadas a favor en casa. Aprovechando esa impronta de mitad de semana, los "merengues" trataron de imponer de inmediato su poderío ofensivo con Jude Bellingham, Kylian Mbappé y Vinícius Júnior, quienes presionaron a los blaugranas , pero mostraron impericia para anotar y cayeron en la impecable trampa del offside que el entrenador catalán Hansi Flick le tendió al tridente: en total, el Madrid quedó doce veces en fuera de juego.
Pudo cambiar el escenario a los 31', cuando Mbappé anotó con un globito ante la salida de Iñaki Peña, pero fue sorprendido medio cuerpo adelantado. A esas alturas, el Barça ya se había soltado los nervios iniciales y plantaba una pelea más pareja.
En el complemento estuvo la diferencia. En solo dos minutos, Lewandowski se encargó de silenciar el estadio, primero (54') con una ajustada definición desde la media luna tras una brillante larga habilitación y luego (56') con un espléndido cabezazo al palo izquierdo de Andrey Lunin.
Dos goles que no solo pusieron en ventaja al Barça, sino que noquearon al Madrid. Desde la banca, Carlo Ancelotti buscó revertir el escenario, pero no tuvo éxito. Entre Mbappé y Vinícius trataron de descontar, pero se encontraron con un sólido Peña, que ganó varios mano a mano.
Y mientras los locales se volcaban en ataque, se olvidaron del fondo y lo pagaron caro: Lamine Yamal (77') con un tiro angulado y Raphinha (84'), con un sombrerito, cerraron la fiesta, que casi se tensa al final, porque algunos miembros de la banca visitante celebraron muy cerca de los dueños de casa, lo que llevó incluso al entrenador italiano a regañar a Flick.
"Nos encanta hacer las cosas bien. No fue fácil, pero tenemos que seguir el camino. En el descanso hicimos un cambio, nos centramos en defender bien y presionar el balón. La clave es que en la segunda parte dominamos mejor la pelota", explicó Flick.
"Estamos dolidos, es un momento duro. No tenemos que tirar todo a la basura, porque no hay nada que tirar. Tenemos que olvidar los últimos 30 minutos", se lamentó Ancelotti.
Triunfazo del Barcelona, que se escapa en el liderato de la tabla con seis puntos de ventaja sobre el Madrid.