La propuesta del congresista Flores Ancachi obligaría a colegiarse para trabajar en cualquier entidad, mientras expertos en derecho laboral advierten efectos negativos.
Por JOSÉ CAYETANO
La Comisión de Trabajo del Congreso de la República debate un proyecto de ley que busca imponer la colegiatura obligatoria para profesionales egresados de universidades, ya sea para trabajar en el sector público, privado o incluso de forma independiente. La iniciativa, presentada por Jorge Luis Flores Ancachi (Acción Popular), plantea que esta medida garantizará la calidad en el servicio, la actualización constante y responsabilidad profesional.
El proyecto de ley 8112 también contempla que los colegios profesionales otorguen habilitaciones gratuitas dos veces al año y permitan fraccionar deudas de colegiatura mayores a tres años. Además, propone modificar la Ley Orgánica de Municipalidades para exigir constancias de habilitación profesional actualizadas como requisito para abrir un negocio. Según Flores Ancachi, estos cambios beneficiarían a la ciudadanía mediante un mayor control del ejercicio profesional y la mejora en la calidad de los servicios.
?En debate?
La propuesta ha generado polémica en los últimos días. Algunos colegios profesionales se pronunciaron a favor de la iniciativa, pero rechazaron el artículo del proyecto que plantea la gratuidad de las habilitaciones, señalando que afectaría sus ingresos. El Ministerio de Educación, por su parte, evitó comentar al respecto.
Expertos en derecho laboral critican duramente la medida. Jorge Toyama considera que la obligatoriedad vulnera la libertad de trabajo y afecta principalmente a los jóvenes, quienes ya enfrentan barreras para acceder al mercado laboral. Gloria del Carmen Rodríguez, también abogada laboralista, añade que la colegiatura obligatoria podría convertirse en una barrera económica, citando costos elevados como los 2.000 a 3.000 soles requeridos para la colegiatura en el Colegio de Abogados de Lima.
Ambos expertos coinciden en que los colegios profesionales deberían enfocarse en ofrecer beneficios e incentivos que motiven la afiliación voluntaria, en lugar de depender de una ley. ?Una ley no genera reputación ni prestigio. Los colegios deben ganarlo?, señala Toyama.
El debate sobre esta iniciativa sigue abierto, y las implicancias podrían transformar el panorama laboral en el país.
DERECHO LABORAL
?Un proyecto de ley de esta envergadura, sin una revisión a fondo, representa una barrera que limitaría el acceso a trabajo de cualquier profesional?, señaló la abogada laboralista Gloria del Carmen Rodríguez.