"Chile ha reconocido la oportunidad que representan las energías renovables y ahora es un líder regional"
Aunque destaca el rol del país, la representante de la Agencia de la ONU asegura que el mundo está "frente a una triple crisis planetaria: la crisis del cambio climático, la crisis de la pérdida de naturaleza (...) y la crisis por la contaminación".
Pasan los años y el cambio climático, con sus impactos cada vez más evidentes, sigue siendo uno de los temas que más preocupan a la comunidad internacional y a los expertos en medio ambiente.
Este año se realizaron distintas cumbres para negociar acuerdos, como la COP16 de Biodiversidad (en Cali, Colombia), la COP16 de Desertificación (en Riad, Arabia Saudita), la COP29 de Cambio Climático (en Bakú, Azerbaiyán), además del quinto período de sesiones del Comité Intergubernamental de Negociación sobre la contaminación por plásticos (INC-5, por sus siglas en inglés, en Busan, Corea). Aunque se lograron algunos acuerdos, como el de la COP29 de triplicar la financiación a los países en desarrollo y pasar de US$ 100 mil millones a US$ 300 mil millones para que puedan proteger de desastres a sus poblaciones y a la economía, los expertos han asegurado que fueron "insuficientes".
Inger Andersen, la directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), afirma a "El Mercurio" que "estamos frente a una triple crisis planetaria: la crisis del cambio climático, la crisis de la pérdida de naturaleza, biodiversidad y tierras, y la crisis por la contaminación y los desechos". Y detalla que "las tres reuniones de las Convenciones de Río de este año solo han subrayado lo indivisible que son estos desafíos. Por ejemplo, sin tierras sanas y productivas, no podremos abordar el cambio climático, la pérdida de la naturaleza ni la seguridad alimentaria".
En ese sentido, plantea que "los titulares de las COP se han centrado en los retrasos y el progreso insuficiente, pero se lograron ciertas decisiones clave en un contexto geopolítico turbulento". Aun así, reconoce que "queda mucho por hacer" y para lograr mantener el camino hacia los 1,5 °C para 2100, "necesitamos una reducción del 42% en las emisiones de gases de efecto invernadero a partir de hoy y hasta el 2030. La siguiente ronda de Contribuciones Nacionalmente Determinadas, que debe presentarse en febrero, será crucial para cerrar esta brecha".
-Recientemente, la quinta sesión del Comité Intergubernamental de Negociación sobre la contaminación por plásticos dejó claro que lograr un consenso global es un desafío complejo. ¿Por qué es crucial avanzar?
"Aunque las negociaciones se suspendieron, se avanzó considerablemente hacia la entrega del acuerdo que el mundo necesita -y que francamente exige- para poner fin a la contaminación por plásticos. Ahora, en la próxima ronda de negociaciones (en 2025), el mundo tendrá la oportunidad de finalmente hacer realidad este acuerdo. Una oportunidad que no podemos permitirnos perder".
- ¿Cómo ve el rol de Chile en el escenario global para abordar estas crisis, y qué esfuerzos adicionales son necesarios?
"Chile ha reconocido la oportunidad que representan las energías renovables y ahora es un líder regional (...). El marco de la Ley de Cambio Climático también proporciona un compromiso claro a largo plazo que reúne a diferentes ministerios para trabajar colectivamente en la consecución de los objetivos climáticos de Chile".
Y precisa que "la Estrategia Nacional de Residuos Orgánicos, una primicia en América Latina, es un ejemplo de cómo abordar estos desafíos".
-Desde su perspectiva, ¿qué tan lejos ha llegado Chile en el cumplimiento de sus compromisos? ¿Qué debe fortalecer?
"Chile, al igual que muchos países, enfrenta hoy los impactos de la triple crisis planetaria (...). Chile entiende claramente los desafíos que tiene por delante, desafíos que está abordando de manera directa".
Y concluye: "El compromiso de Chile de lograr la neutralidad de carbono para 2050, respaldado por planes para eliminar las plantas de carbón e introducir una de las flotas de autobuses eléctricos más grandes de América Latina, también contribuirá a reducir las emisiones en varios sectores".