La región duplica la participación de renovables en la matriz de energía primaria (33%) al mundo (13%). Y en cuanto a la generación eléctrica, las fuentes limpias son un 68% versus 30% el promedio mundial.
Desde hace una década, muchas regiones del planeta han acelerado sus estrategias de transiciones energéticamente limpias. América Latina y el Caribe (ALC) es la que más y mejor lo ha hecho.
Dotada de una enorme cantidad de recursos naturales renovables y de no pocas reservas de recursos fósiles, nuestra región viene cumpliendo con una ambiciosa agenda energética que muestra buenos resultados este período. ALC duplica la participación de renovables en la matriz de energía primaria (33%) al mundo (13%). Y en cuanto a la generación eléctrica, las fuentes limpias son un 68% versus 30% el promedio mundial.
En el año 2023, la generación eléctrica renovable se incrementó un 3% y se espera que en el 2024 el incremento anual sea del 13%
En 2023 el 77% de la nueva capacidad instalada en la región fue renovable. En 2024, el 79% de las adiciones de capacidad también será renovable.
En cuanto a las energías renovables no convencionales, en el año 2023, la capacidad de generación eléctrica con fuentes eólica y solar se incrementó en un 15% y 37% respectivamente y se espera que para el 2024 este incremento sea de 34% y 33%.
Además, seguimos siendo una región exportadora de energía. De hecho, el año 2023 la región produjo un 12% más que el total de energía demandada, lo cual se reafirma en este 2024 con un 27% de superávit en la producción energética.
Estos avances han convivido con una agenda climática compleja y desafiante con recurrencia de eventos extremos que van desde grandes sequías a grandes inundaciones, fenómenos que incluso han afectado y puesto en riesgo el suministro de electricidad en algunos países de la región.
Estas son algunas de las conclusiones del "Panorama Energético de América Latina y el Caribe 2024" de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE) que elaboramos anualmente y que puede ser consultado en nuestro sitio web.
Prospectiva
Este Panorama incorpora además un estudio de prospectiva al año 2050, simulando un escenario NET-0 de la región que considera: una penetración mucho más acelerada de las energías renovables, tanto en la generación eléctrica como en el consumo final de energía, una mayor electrificación de los sectores de consumo, incluyendo el transporte, un incremento importante en la eficiencia energética, sistemas de almacenamiento de generación renovables y proyecciones de consumo interno y exportación de hidrógeno verde a mercados extra regionales, como nuevo vector energético.
Estas proyecciones indican que: i) debido al incremento en la eficiencia energética, en el 2050, existirá un ahorro en el consumo de energía del 21% respecto al proyectado en un escenario tendencial y el 50% del consumo energético total será de origen renovable; ii) al año 2050 la capacidad instalada en generación se cuadruplicará por lo que se requerirán 1,500 GW adicionales de capacidad de generación renovable, cantidad equivalente al triple de la capacidad instalada actual; iii) la generación eléctrica con energía eólica y solar al 2050, representará más del 50% de la generación total de la región y el 85% de dicha generación total será de origen renovable; y iv) al año 2050, las emisiones tendrán una reducción de 7% con relación al 2022 y 37% menos de lo proyectado en un escenario tendencial para ese año.
Desafíos
Con estos avances, la región se encuentra en una muy buena posición para abordar los desafíos aún pendientes. Hay que reducir la brecha existente de 17 millones de habitantes que aún no cuentan con acceso a la electricidad; mejorar los sistemas de cocción y calefacción; reforzar los instrumentos de eficiencia energética; y avanzar en la nueva industria del hidrógeno de bajas emisiones y sus derivados. En varias de esas líneas, Uruguay también se encuentra entre los líderes regionales.
Algunos de los temas que serán parte de la agenda el 2025 son: i) la incorporación de energía eólica offshore, ii) debate y análisis sobre la importancia de ampliar la generación nuclear en base a los nuevos desarrollos tecnológicos en este sector, iii) fomentar las inversiones en el sector de transporte de energía eléctrica e iv) incorporación de tecnologías de almacenamiento para complementar y dar seguridad a los sistemas eléctricos en la región.
- Andrés Rebolledo Smitmans es Secretario Ejecutivo de la Organización Latinoamericana de Energía, OLADE. Columnista invitado.
El País, Uruguay
31 de diciembre de 2024
