Construcción e industria hunden las expectativas
Los empresarios esperan que la leve mejora del IMCE en mayo anticipe un mejor segundo semestre.
La confianza empresarial suma un tercer mes consecutivo con sus expectativas en terreno pesimista. En mayo, el Indicador Mensual de Confianza Empresarial (IMCE), que elaboran Icare y la UAI, se ubicó por debajo del umbral neutral de 50 puntos, arrastrado por los niveles pesimistas del sector de la construcción y la industria. Por otro lado, los rubros de la minería y el comercio se ubicaron en un plano optimista.
El indicador global alcanzó los 46,69 puntos, en un mes marcado por la guerra comercial y una actividad económica que muestra una acotada expansión. La cifra representa un avance de menos de un punto respecto del mes anterior, y de poco más de un punto en comparación con mayo del año pasado.
Además, las expectativas de inflación para los próximos doce meses continúan siendo altas. "El IMCE de mayo nuevamente reporta un valor de 4,4%, cifra que se ha mantenido estable durante todo el año 2025. Cabe destacar que estas expectativas han mostrado muy poca variación en los últimos doce meses, con una fluctuación acotada entre 4,3% y 4,5%. Esta estabilidad sugiere una alta persistencia del escenario inflacionario local", comenta Pablo Pincheira Brown, profesor asociado de la Escuela de Negocios UAI. En contraste, la meta del Banco Central apunta que la inflación llegue a 3% en un horizonte de dos años.
Futuro repunte
Sin embargo, los empresarios creen que el avance en el margen muestra que están las bases para un mejor segundo semestre en lo económico.
"El IMCE del mes de mayo entrega señales mixtas, pero con elementos para mirar el segundo semestre con algo más de optimismo. Aunque se mantiene en zona pesimista, destaca el avance del comercio y la industria, y la estabilidad de la minería con altas expectativas de producción y confianza en la economía. El comercio supera el umbral neutral, con buenas perspectivas de negocio, mientras que la industria empieza a recuperarse en producción e inversión. Esto, junto a la baja en costos y la estabilización de la inflación esperada, entrega algo de aire para el segundo semestre", comenta María Loreto Giacaman von der Weth, CFO de Ultramar Agencia Marítima e integrante del Círculo de Economía y Finanzas de Icare.
Pese a que acota que la construcción sigue rezagada y que esta situación pone presión sobre la urgencia de destrabar inversión, afirma que hay "señales alentadoras". "Los sectores más dinámicos comienzan a reactivarse y las empresas parecen prepararse para escenarios más positivos. Si el ciclo electoral no entorpece los avances y se consolidan medidas proinversión como la simplificación de permisos, el leve optimismo que se asoma podría transformarse en reactivación real", dice.
Rodrigo Huidobro, CFO de Empresas Copec y miembro del Círculo de Economía y Finanzas de Icare, resalta que "se mantiene un alza bastante consistente respecto a las cifras mensuales de los dos años anteriores, aun en un escenario global incierto; por otro lado, la minería sigue mostrando buenos niveles de confianza, lo que es positivo dada su relevancia en la economía nacional, y presenta cifras especialmente buenas en algunas variables".
Distinta es la visión de Pincheira, que cree que el ligero incremento del IMCE en mayo "refleja la fragilidad de la confianza empresarial, en un contexto caracterizado por una economía que, a pesar de mostrar cierto dinamismo, aún enfrenta desafíos importantes, como un alto desempleo, un bajo crecimiento tendencial, una inflación algo elevada y persistente, y un entorno global marcado por una creciente incertidumbre".
46,69 puntosalcanzó el IMCE en mayo, por debajo del umbral neutral de 50 puntos.