Separación, divorcio, coach y después
En sociedades como la norteamericana -tan obsesionada con la positividad y el éxito- tenemos un entrenador para cada situación de la vida
En sociedades como la norteamericana -tan obsesionada con la positividad y el éxito- tenemos un entrenador para cada situación de la vida. Le sucedió eso a Bryan Abasolo, estrella del reality show The Bachelorette . Bryan acababa de separarse de su compañera de reality y se sentía, en sus propias palabras, devastado emocional y psicológicamente. Desde Instagram alguien le chistó y le sugirió que consultara a un coach en divorcios.
Las tarifas de esta nueva profesión oscilan entre 50 y 300 dólares la hora. Proveen asesoramiento para el cambio de look, armar un régimen de ejercicio físico, reforzar la autoestima y abrir un perfil en una aplicación de citas; es decir: ayudan al sujeto a convertirse en el estereotipo del recién divorciado.
Tenemos aquí, señores, al mercado es su faceta más perfecta. Ante cada nueva necesidad, surge un servicio que vender. En este caso se trata de contratar un poco de positividad para ese momento triste de la vida de un sujeto que se separa de su pareja.ß
Algo más...
En la reciente comedia de Netflix Las cuatro estaciones , un esposo dubitativo contrata el servicio de alguien que lo aconseja en una situación tormentosa, a fin de ayudarlo con "una opinión objetiva" y brindarle orientación. Él ya no escucha a amigos ni a terapeutas: prefiere a entrenadores que se comunican por celular.ß