Con más tecnología, confort y versatilidad, la marca acompaña al deportista antes del entrenamiento y en cada desafío físico
Under Armour entendió desde el principio que el rendimiento no empieza solo en la cancha, sino mucho antes, con lo que uno se pone sobre la piel. Con esa visión nació en 1996 su prenda insignia HeatGear, una capa base diseñada para ser tan liviana y funcional como una segunda piel. Hoy, más de 25 años y 37 prototipos después, la marca continúa impulsando esta línea, disponible en Uruguay, con propuestas que combinan tecnología, funcionalidad y estilo urbano.
"La línea Baselayer representa el origen de Under Armour: fue la primera prenda desarrollada por la marca y es donde seguimos siendo los mejores", afirmó Maximiliano Volterra, Brand Manager de Under Armour en Uruguay. Esta colección está diseñada con tejido suave y liviano, secado rápido, diseño ergonómico y costuras reubicadas para evitar roces incómodos. Además, cuenta con paneles de malla en puntos clave para mejorar la ventilación y la regulación de la temperatura corporal, incluso en entrenamientos de alta exigencia. Estas características reflejan el resultado de décadas de perfeccionamiento constante, con foco en ofrecer una experiencia superior desde el primer uso.
Moverse más y mejor
Baselayer no es solo una prenda, es una herramienta que fusiona tecnología, esfuerzo y comodidad. Diseñada para adaptarse al cuerpo del deportista y acompañar su movimiento, esta primera capa está disponible en múltiples formatos camisetas, shorts, leggings, bras y más y fue pensada para quienes exigen alto rendimiento, ya sea en competencia, entrenamiento o recuperación. "Está dirigida a atletas y entusiastas del fitness que buscan mejorar su rendimiento mediante prendas técnicas de alta calidad", explicó Volterra.
Pero el impacto va más allá de lo deportivo. En los últimos años, el uso urbano de este tipo de indumentaria también creció de forma sostenida, especialmente entre los más jóvenes. Gracias a su comodidad real, versatilidad y estética, HeatGear se integró con naturalidad en la vida cotidiana, convirtiéndose en una opción cómoda y funcional para quienes se mueven todo el día. Esa transición natural de lo deportivo a lo cotidiano marca un nuevo estándar en la categoría, donde el confort y la tecnología se combinan con el estilo.
Expansión local
Este cruce entre alto rendimiento y vida diaria está en el ADN de la marca, y también en su estrategia para Uruguay. "Vemos una gran oportunidad de expandir su alcance en Uruguay, donde aún hay espacio para diferenciarnos frente a la competencia", señaló Volterra. Por eso, Under Armour apuesta fuerte a Baselayer, tanto en sus tiendas propias como en su canal digital underarmour.uy y en las principales casas de deporte del país. "El objetivo es que cualquier persona en Uruguay pueda acceder a esta prenda icónica, sin importar dónde esté", añadió el ejecutivo.
La recepción ha sido positiva, impulsada por el reconocimiento de una prenda que, desde su aparición, "cambió el juego". Frente a camisetas pesadas y saturadas de sudor, HeatGear ofrece, según indicó Volterra, una alternativa liviana, respirable y de secado rápido. Hoy, Baselayer es esa primera capa que eligen quienes entrenan con mentalidad ganadora y saben que el rendimiento empieza antes de la actividad.
Un futuro sostenible
Mirando hacia adelante, la marca ya proyecta el próximo gran paso en esta categoría: HeatGear Elite, una evolución que incorporará no solo mayor tecnología, sino también innovación en sostenibilidad. "Esta colección incluye por primera vez la fibra Neolast, desarrollada junto a Celanese como una alternativa al elastano tradicional. Es reciclable, libre de solventes y más amigable con el medioambiente", adelantó Volterra.
Con este paso, Under Armour busca seguir liderando la categoría de primeras capas técnicas, manteniendo siempre su compromiso con la innovación y el cuidado del planeta.