Linares, bronce en el Mundial de Atletismo, quiere ser la mejor del mundo

La deportistas vallenata de 22 años, además, le rompió el récord nacional de la prueba a caterine ibargüen.
Natalia Linares solo tiene 22 años, pero a esta altura de su corta vida ya ha conseguido resultados importante en su carrera y es una de las deportistas que le apuntan a una medalla en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles del 2028. A sus 22 años sabe que la responsabilidad que lleva en sus hombros es gigante, pues la medalla de bronce que ganó en el Mundial de Atletismo de Tokio en el largo así lo dice. La colombiana clasificó a la final tras terminar de sexta con una marca de 6,66 y la expectativa era alta para lograr un lugar en el podio que al final consiguió. Y en la final, con el salto de 6,92 superó su propia marca para ser medalla de bronce en la disciplina y lograr la undécima presea en la historia del país en esta clase de certámenes. Natalia Linares compartió el podio en el Mundial con la estadounidense Tara Davis Woodhall, quien impuso una marca de 7,13 y fue medalla de oro; y de la alemana Malaika Mihambo, que marcó 6,99. Su máximo reto es, primero, alcanzar el registro de siete metros, luego, superarlo, y convertirse en la mejor del mundo en esta competencia en la que han brillado deportistas de la talla de Jesse Owens, Mike Powell, Carl Lewis y Marion Jones en damas. Fue oro en los Juegos Bolivarianos con 6,95 m, marca nacional que le quitó a Caterine Ibargüen. ¿Qué análisis hace de su año deportivo? Fue una temporada muy retadora. Nos propusimos metas y las hemos alcanzado. Ganamos en el Mundial universitario y en el de Tokio, en ambos certámenes logramos medallas de bronce. ¿Qué le dicen esos resultados? Trabajamos firme por esos resultados y eso me motiva para un mejor 2026. Eso me deja tranquila, pero quiero más. Esos dos bronces nos dicen que debemos de trabajar mucho más, porque el año que vine tiene que ser mejor, hay que superar lo del 2025. ¿Y cuál es su meta para el 2026? Quiero ser la mejor del mundo. Queremos ir por el oro en el Mundial bajo techo en marzo y ahí miraremos. Ese será el punto de partida. ¿Por qué el éxito en Tokio? Luego de los Olímpicos de París analizamos todo lo malo y lo corregimos. Eso nos dio la posibilidad de estar en la final y pelear el podio. ¿Por qué en la premiación no se le vio tan eufórica? Celebré la medalla, pero tras la premiación pensé que ese objetivo estaba chuliado. No sé si me explique, es que ya me había visualizado en el podio, entonces era una meta cumplida. El reto que viene es más grande... Es eso. Recibí la medalla, pero es que ya me había ilusionado y desde se instante pensé que debo ir por más. Soy medallista, pero quiero ser la mejor del mundo y esa es la motivación. Pasar esos siete metros. ¿Ser una de las deportistas del año la motiva más? Este año ha sido importante para varios deportes: boxeo, pesas, gimnasia, ciclismo en pista, eso me dice que el deporte colombiano ha tenido muchas glorias. Fue un año competitivo, muy glorioso y ser de las destacadas me enorgullece, pero al mismo tiempo es un reto.