Esta vegetación juega un papel clave en la disponibilidad de agua en nuestro país.
El Perú tiene 14 millones de hectáreas de terreno, sobre los 3.800 m.s.n.m., donde crecen pastizales andinos. Estos son alimento para el 80% del ganado nacional, pero más de 8 millones de estas hectáreas están en proceso de degradación, lo que afecta el 43% de la demanda nacional de carne y el 23% de la demanda de leche.
?Los pastizales andinos tienen relación directa con las grandes ciudades, sobre todo de la costa. El agua que usamos viene de la región montañosa. Los pastizales de estas zonas son claves para la función hidrológica y la disponibilidad del agua?, explica a El Comercio Javier Ñaupari, investigador de la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM).
El buen manejo de estos pastizales permite mejor disponibilidad y calidad del agua. ?De lo contrario se afecta la infiltración del agua para la napa freática y la alimentación de lagunas y ríos, así como la captura de dióxido de carbono?, agrega el experto.
Estos temas se tratan hasta hoy en el Congreso de Ecosistemas Altoandinos de Puna 2019, organizado por la UNALM, que reúne a expertos del Perú, Argentina, Chile y EE.UU. en torno al manejo de pastizales en nuestro país.