El Comercio, Perú
3 de enero de 2020
El fantasma de altas temperaturas amenaza con avivar más el fuego, que ya causó la muerte de 18 personas, y obliga a evacuaciones.
Las autoridades de Australia ordenaron ayer la evacuación de miles de personas a causa de los incendios forestales en el sureste del país, que se han cobrado la vida de 18 personas, y ante la amenaza de que se agraven en los próximos dos días.
En el estado de Nueva Gales del Sur, el más afectado por los incendios, se ha declarado nuevamente el estado de emergencia debido a los pronósticos de temperaturas por encima de los 40 grados y fuertes vientos en la costa meridional para este fin de semana.
La medida permitirá a los bomberos de Nueva Gales del Sur realizar evacuaciones forzosas ante el avance del fuego, que ha arrasado cinco millones de hectáreas y destruido más de 1.300 viviendas, 400 de ellas arrasadas durante los últimos días en el sureste del país.
De acuerdo con investigadores de la Universidad de Sidney, cerca de 500 millones de animales y plantas han muerto debido al fuego.
?La prioridad hoy es combatir el fuego y evacuar a la población para ponerla a salvo?, dijo el primer ministro australiano, Scott Morrison, mientras visitaba algunas de las zonas afectadas.Ante la gravedad de los incendios, Morrison se reunirá el lunes con el Comité de Seguridad Nacional para abordar la respuesta del gobierno federal a estos incendios que normalmente son combatidos en el ámbito estatal y que se prevé arderán durante muchas semanas más.
El mandatario, defensor de la industria del carbón y duramente criticado por su política climática, señaló que ?no existe duda de que son desastres naturales?, al insistir en que el cambio climático global no está vinculado a una incidencia de incendios forestales en particular.
?Indignación y rabia?
Australianos furiosos encararon ayer a Morrison, a quien acusaron e insultaron durante su visita a Coburgo, en Nueva Gales del Sur.
Ciudadanos de la región le hicieron gestos obscenos y lo llamaron ?idiota?, criticándolo por la falta de equipo contra los incendios. En Quaama, otra localidad de Nueva Gales del Sur, un bombero se negó a estrecharle la mano.
?Cada vez que esta área tiene un incendio, nosotros no tenemos nada. Si fuéramos Sidney, si estuviéramos en la cosa norte, estaríamos inundados de donaciones y ayuda de emergencia?, dijo un vecino de Coburgo.
la ayuda del tenis
El mundo del tenis, cuya temporada en Australia empieza en enero, iniciará una colecta para las víctimas de los incendios.
Los incendios son un tema de diálogo más importante que la ATP Cup, competición por equipos que empieza hoy en Brisbane, Perth y Sidney.
El aire se ha visto contaminado en tales urbes por una nube de humo tóxico causado por los fuegos.
Según los organizadores, expertos médicos vigilarán las condiciones de juego y los partidos se suspenderán si fuera necesario.
