La vuelta de la actividad en gran parte del país no frenó el pedido de asistencia de las empresas

Si bien desde el gobierno nacional destacaron en las últimas semanas que la actividad económica se reactivó en gran parte del territorio nacional, el número de empresas que solicitaron la asistencia del Estado para pagar los salarios se mantiene sin cambios.
Según datos que evaluó el presidente este miércoles con el gabinete económico, ya se anotaron en la tercera fase del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción, denominado ATP3, 240.000 empresas, que representan un total de 2.300.000 trabajadores. Tras el cierre de la inscripción, que será el viernes, comenzará la etapa de revisión sujeto s los nuevos criterios "sectoriales y de facturación".
En medio de la crisis económica, desde la Casa Rosada en el plan por el que el Estado se hace cargo de la mitad del salario de los trabajadores de firmas en crisis. Para eso, resolvió dividir al país en dos zonas: Dispo (llamada así porque en ellas rige "distanciamiento social, preventivo y obligatorio"), que integran las zonas con baja circulación de virus y con distanciamiento social) y ASPO (por el "aislamiento social, preventivo y obligatorio"), que incluye a la ciudad de Buenos Aires, el Gran Buenos Aires y Resistencia, entre otros distritos.
En donde ya se retomó la actividad, unas 19 provincias, las empresas que solicitaron la asistencia recibirán como máximo un salario mínimo vital y móvil ($16.875) por trabajador involucrado. En las zonas más afectadas por la cuarentena la ayuda será de hasta dos salarios, como en las dos oportunidades anteriores.
Sin definiciones de última hora, el Gobierno está enfocado en la lucha contra el coronavirus y el impacto que busca lograr con el regreso a una cuarentena más estricta en la ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires.
La presencia del Presidente en la reunión del comité de crisis económico fue una de las particularidades del encuentro. Generalmente, Fernández delega esa actividad en su jefe de Gabinete, , quien también estuvo en el cónclave en la quinta presidencial de Olivos. Completaron la foto los ministros Martín Guzmán (Economía), Claudio Moroni (Trabajo), Matías Kulfas (Desarrollo Productivo); la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca; el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, y la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont.
Durante el encuentro, en el que se discutieron los alcances de la negociación por la deuda -en la Casa Rosada insistieron en que aún "quedan asuntos por resolver"-, también trabajaron en la prórroga por 60 días del programa de Precios Máximos y los "acomodamientos lógicos que tienen que ver con costos de materias primas".
Además, Kulfas y Guzmán hicieron un repaso de los sectores críticos que ven su nivel de actividad muy afectado, como el turismo, entretenimiento, industrias culturales, y se "comenzaron a definir herramientas flexibles que permitan atender las heterogeneidades que se presentan según el sector, el tamaño de la empresa, como la actividad específica".
Otro de los puntos que se trató fue el plan Moratoria AFIP Integral, que fue diseñado "con el objetivo de que las empresas de todos los tamaños puedan empezar a producir, cuidando el empleo". En este punto, Pesce hizo un repaso de las distintas líneas de crédito que hay en estudio para que las empresas puedan tener acceso a capital de trabajo.
Por último, Cafiero realizó un informe sobre las transferencias y ayudas giradas a las provincias, porque los niveles de recaudación, tanto de las provincias como de la Nación, fueron muy afectados por la pandemia.
"Nosotros tratamos de socorrer a todos en la medida de lo que podemos. El apoyo que el Estado ha dado al sector privado para que no lastime tanto la pandemia casi roza 3 puntos del PBI", había resaltó el jefe del Estado el día que anunció mayores restricciones para los habitantes del área metropolitana.