Pero aclara que los beneficios de la vacunación superan a cualquier riesgo.
El misterio de los graves e inusuales problemas sanguíneos, observados en algunas personas que recibieron la vacuna de AstraZeneca contra el COVID-19, empieza a disiparse tras una reunión de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
La EMA reconoció que la vacuna podía provocar, en algunas personas, problemas sanguíneos inhabituales. Para la OMS, ese vínculo es algo plausible pero sin confirmar.
Los problemas observados no son trombosis corrientes (formación de coágulos sanguíneos), como se informó en un principio, sino un fenómeno ?muy atípico?, según la Agencia Francesa de Medicamentos (ANSM).
Son ?trombosis de las venas grandes, atípicas por su localización (cerebral en su mayoría), que pueden estar asociadas a una trombocitopenia [déficit de plaquetas sanguíneas] o a problemas de coagulación?, como hemorragias, dice la ANSM.Los expertos del comité de la OMS dicen que más de 200 millones de personas se han vacunado con AstraZeneca y que este tipo de efectos secundarios raros ?deben compararse con el riesgo de muerte por COVID-19 y el potencial de las vacunas para evitar infecciones y muertes por la enfermedad?.
La OMS recordó que la mayoría de los efectos secundarios tras recibir una vacuna, en general dos o tres días después, suelen ser leves.?Globalmente, esos dos exámenes reafirmaron que la vacuna ofrece una protección de alto nivel contra todas la formas graves de COVID-19 y que esos beneficios continúan superando ampliamente los riesgos?, indicó AstraZeneca.