Muere Adriana Hoffmann, botánica pionera en divulgación ambiental
Autora de 12 libros sobre identificación de la flora nativa chilena, su trabajo fue reconocido por la ONU y con el Premio Nacional de Medio Ambiente.
Los ministerios de Ciencia y Medio Ambiente, el Parque Metropolitano de Santiago y el Sindicato de Guardaparques y Trabajadores de las Áreas Silvestres Protegidas de Chile fueron parte de los organismos que ayer, a través de sus redes sociales, enviaron mensajes para despedir a la bióloga Adriana Hoffmann Jacoby, destacada defensora del patrimonio natural del país, quien falleció el domingo a los 82 años.
La cuenta en Twitter de ONU Mujeres en Chile se sumó a los homenajes describiéndola como una "defensora incansable del medio ambiente, pionera de la divulgación científica, la conservación y los bosques chilenos".
Nacida en 1940, Hoffmann comenzó estudiando Agronomía en la U. de Chile para luego especializarse en botánica. A partir de los años 90, fue coordinadora de la ONG Defensores del Bosque Chileno, desde donde advirtió la necesidad de prestar atención y preservar las especies nativas.
Antes de que hablar de cambio climático y desarrollo sostenible se volviera popular, su faceta de divulgadora la llevó a ser autora de diferentes libros relacionados con temas medioambientales, transformándola en una pionera en temas de cuidado de la Tierra. Entre sus obras más reconocidas destacan "De cómo Margarita Flores puede cuidar su salud y ayudar a cuidar el planeta", "La tragedia del bosque chileno" y "Flora silvestre de Chile, zona araucana".
La premio nacional de Ciencias Naturales Mary Kalin, quien junto a Adriana Hoffmann es coautora de "Plantas altoandinas en la flora silvestre de Chile", recuerda que, para recopilar información para sus libros, Hoffmann "se ponía los bototos y se metía al bosque".
"Adriana es realmente una pionera: predijo que las personas necesitaban tener más información sobre la flora de Chile de una forma que fuera fácil de entender, pero con una base científica", recuerda la también botánica.
El trabajo de Hoffmann la llevó a ser reconocida en 1997 como una de las 25 líderes ambientalistas de la década de 1990 por la Organización de Naciones Unidas, y en 1999 fue galardonada con el Premio Nacional de Medio Ambiente en la categoría de Educación Ambiental. En el año 2000 asumió como directora ejecutiva de la Comisión Nacional de Medio Ambiente.
El Ministerio del Medio Ambiente impulsó la Academia de Formación Ambiental Adriana Hoffmann -enfocada en entregar educación ambientalista a nuevas generaciones- en 2015.
Durante su extensa carrera, la botánica también tuvo espacio para "El Mercurio". Desde principios y hasta mediados de los 90, en la revista Vivienda y Decoración, escribió columnas centradas en temas como plantas comestibles, cómo fabricar papel sin árboles o sobre las flores chilenas de exportación.