"Los años maravillosos" vuelven con un remake

"Los años maravillosos", sitcom que se emitió originalmente entre 1988 y 1993, es considerada hasta hoy uno de los mayores clásicos de la TV familiar reciente, uno que además marcó e influyó en muchas producciones posteriores.
Relataba la vida de una típica familia americana de clase media, viviendo en los suburbios a fines de los años 60 y principios de los 70, con especial atención en Kevin Arnold, el precoz protagonista de 12 años cuya versión adulta narra la historia.
La premisa vuelve ahora con un remake que debuta mañana en Disney+ y que cambia a la familia original por una afroamericana viviendo en Alabama en los años 60. Lee Daniels ("Empire"), productor de esta adaptación, explicó en un panel para críticos de televisión en el que estuvo presente "El Mercurio" que buscaban mostrar las experiencias de una familia de color en aquella época, marcada por la lucha por los derechos civiles, que la audiencia no haya visto antes.
"Cuando piensas en este período en la América negra, no piensas realmente en la clase media. Esta es nuestra historia, una que no ha sido contada al país", aseguró.
Al igual que la serie original, hay un narrador adulto, Dean (Don Cheadle), que les relata a los espectadores sus vivencias en la entrada a la adolescencia, etapa en la que es interpretado por Elisha Williams.
Fred Savage, quien encarnó a Kevin Arnold en la serie de los años 80, se suma también al proyecto como productor y director en varios de los 20 episodios de la primera temporada. "Una familia nueva y personajes totalmente nuevos nos permiten mantener algunas de las cosas que amamos de la serie original, y a la vez contar una historia única", comentó en el panel sobre la decisión de no hacer una secuela, como han hecho otras series basadas en clásicos de esa década que han surgido en los últimos años.
La nueva "Los años maravillosos" fue creada por Saladin K. Patterson, quien tiene amplia trayectoria en comedias como "The Big Bang Theory" y "Two and a Half Men". El guionista explicó que de todas formas buscaron reflejar el agitamiento social y político de la época, pero a través de la perspectiva de un niño de 12 años.