CPC afirma que el avance económico de febrero fue "puntual" pero sube proyección anual de crecimiento a 2%
En el sector empresarial ven con preocupación la debilidad de la inversión, los mayores costos tributarios, laborales y "altos niveles de incerteza".
En el sector empresarial analizan positivamente el buen desempeño económico registrado en febrero, pero advierten que no despeja las preocupaciones de mediano plazo. La Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) actualizó su diagnóstico sobre el desarrollo reciente de la economía chilena, previo al Informe de Política Monetaria (IPoM) del Banco Central, y proyectó un crecimiento económico en un rango entre 1,5% y 2,5% durante 2024.
Dicho pronóstico implica un ajuste al alza respecto del rango entre 1% y 2% que estimaban en el gremio durante diciembre. Dentro de los factores que incidieron en esta corrección, la CPC considera que el ajuste a niveles de consumo más sostenibles está concluyendo, y que niveles de inflación más contenidos abren paso a una política monetaria más expansiva. Incluso, proyectan que pese a variaciones puntuales, la inflación debería seguir avanzando hacia la meta del Banco Central, y terminar este año con una variación de 3,4%.
También creen que "menores niveles de incertidumbre política y reformas económicas que gracias al trámite parlamentario están acotando sus efectos negativos, han contribuido a un mejor desempeño en el corto plazo".
Más allá de la estimación anual, consideran que la expansión de 4,5% que registró el Imacec de febrero es una buena noticia, pero que se debe analizar con cautela: "El dato puntual de febrero no cambia la situación estructural de la economía chilena, con un crecimiento de largo plazo en torno al 2%". Resaltan que en el crecimiento mensual de febrero inciden un mayor dinamismo de la minería y los servicios, además de factores estadísticos. Para ratificar esa tendencia, dicen, las tareas urgentes deben ser "la crisis de seguridad, avanzar hacia la competitividad tributaria, mejorar la certeza jurídica, y aumentar así la inversión y el empleo".
Inversión estancada
En las proyecciones para este año, prevén que la mayor recuperación estará ligada al consumo privado. Anticipan una expansión de 2,5% para este indicador, favorecido por menores tasas de interés y restricciones crediticias, además de un mercado laboral algo más dinámico. Eso sí, remarcan que, en materia de empleo, se observa con preocupación los mayores costos laborales que significa la implementación de proyectos como la reducción de jornada laboral y el aumento del salario mínimo a $500.000, además de propuestas en curso como una mayor cotización previsional. "Tendrán efectos negativos en la generación de empleos formales cuyos efectos se verán con mayor fuerza hacia mediados de 2024", aseguran.
Pero la mayor preocupación la asignan al crecimiento de mediano plazo, reflejado en una inversión que permanece debilitada. Esperan que este indicador termine 2024 con un retroceso del 1%, con perspectivas de largo plazo que "siguen estancadas, con eventuales alzas de costos -tributarios, laborales- y con altos niveles de incerteza jurídica".
La CPC enumera una serie de riesgos que detectan hoy para la economía. Creen, por ejemplo, que la cercanía con un nuevo proceso eleccionario "podría alentar proyectos de ley que tengan foco electoral, pero resultados negativos en lo económico". También estiman que la discusión sobre eventuales alzas de impuestos "puede tener efectos adicionales y significativos sobre las decisiones de inversión y sobre el empleo formal". Asimismo, asignan un potencial efecto negativo al posible colapso del sistema de salud privado, a los problemas de orden público y las propuestas de nuevos retiros de fondos de pensiones.