Nike, ingreso no deseado en Alemania

Ricardo

Gaitán
Las marcas alemanas de equipamiento deportivo Adidas y Puma, con un pasado entrelazado con aspectos turbulentos de carácter familiar, político y comercial que marcaron la historia del siglo XX, hoy tienen en su casa un intruso que sus coterráneos no querían: Nike. La empresa alemana de ‘Zapatos de los Hermanos Dassler’ (Adolf y Rudolf), inició actividades hace cien años (1924) en Herzogenaurach confeccionando zapatillas para deportistas. Adolf era el diseñador y Rudolf el líder de ventas. El gran acierto fue convencer a Jesse Owens, primer atleta negro de origen estadounidense, para que usara sus zapatillas en los Juegos Olímpicos de Berlín 1936. Owens se colgó cuatro medallas de oro y la empresa se disparó. Durante la II Guerra Mundial, la fábrica se volvió, al igual que otras, en fuente de abastecimiento para el ejército Nazi. Además de botas y prendas militares, crearon el Panzerfaust, un arma antitanque. Al término del conflicto, los hermanos fueron acusados por su colaboración al régimen. A Rudolf se lo catalogó como "miembro de alto nivel del nazismo", a Adolf lo lo enjuiciaron por su cooperación. En la apelación de Adolf, Rudolf declaró que su hermano había organizado la producción de armas para su beneficio y que él había sido quien se opuso. Esta circunstancia convierte a los hermanos en enemigos acérrimos y la empresa se divide: Adidas contra Puma. Aunque la rivalidad continúa después de 76 años, las ‘marcas hermanas’ adquirieron un espacio importante en lo deportivo, y en la industria textil, fortaleciendo la economía alemana, al punto de ser reconocidas marcas país junto con otras como: Volkswagen, Allianz, BMW, Siemens, Daimler y Benz. Apesar de la lealtad arraigada hacia marcas locales, los beneficios financieros y de exposición que una marca como Nike puede ofrecer consiguen superar esas lealtades, y es lo que pasó en marzo de 2024 con el anuncio de Nike, le quita a Adidas el contrato de la Federación Alemana de Fútbol. El hecho quiebra una alianza de setenta años vistiendo a los deportistas alemanes de varias disciplinas. Nike es una marca estadounidense con gran presencia en el mundo del deporte, y una capacidad para ofrecer acuerdos de patrocinio atrayentes, que son difíciles de resistir para las federaciones deportivas de cualquier país. En la Copa Mundial de Fútbol de 2026 que tendrá lugar en Norteamérica, la selección de Alemania vestirá por última vez la camiseta y las zapatillas rubricadas con las tres líneas verticales que identifican a Adidas. A partir de 2027, los atuendos de los deportistas de la República Federal de Alemania ostentarán el logotipo de Nike. Para muchos es como si hubieran estampado el logotipo de la marca estadounidense en el centro de su bandera. Una pregunta queda flotando en el ambiente: ¿qué hubiera pasado si las hermanas, Adidas y Puma, superan su rivalidad de 76 años y unidas evitan el ingreso no deseado de Nike?
Analista de marca.