"El elixir de amor", la ópera que llega en uno de los momentos más sensibles del Teatro Municipal de Santiago

Se la conoce como una de las joyas del Belcanto , pero también como un notable ejemplo de comicidad y melancolía. Ayer se estrenó en el Teatro Municipal de Santiago "El elixir de amor", de Gaetano Donizetti, en una nueva producción ambientada en el campo chileno y que lleva firma de la elogiada dupla conformada por Rodrigo Navarrete (dirección de escena) y Ramón López (escenografía e iluminación).
Un mundo sosegado y bucólico, con jóvenes amantes, pero también rumores y un torbellino de acontecimientos, son parte de los atractivos de este título que bien podría leerse como una metáfora de una de las semanas más difíciles que ha debido enfrentar este año la Corporación Cultural de Santiago, y en particular, la Orquesta Filarmónica.
Tal como lo publicó este diario, el pasado martes, el músico Roberto Rizzi Brignoli (Italia, 1961) renunció de manera sorpresiva a su cargo como titular de este conjunto (a un año y tres meses de finalizar su contrato). Todo partió el viernes 27 de septiembre con un escueto correo: "Estimada orquesta. Mediante la presente carta deseo comunicar mi renuncia al cargo de director titular a partir del 1 de octubre de 2024". El propio director explicó a "El Mercurio" que, tras una profunda reflexión, no se referirá a su salida.
El artista italiano asumió en 2020, en plena pandemia, tras ser convocado, en 2019, por el directorio junto al director general de la época, el francés Frédéric Chambert. Su contrato fue renovado en 2023 por la actual directora general, Carmen Gloria Larenas, ya que durante su primer período -por razones obvias del coronavirus- no pudo viajar a Chile y desarrollar un trabajo presencial.
Tras revelarse la carta, trascendieron diversas hipótesis en torno a su alejamiento; desde asuntos personales hasta diferencias con la dirección del teatro respecto de los elencos y equipos técnicos de las óperas, pero también topes de fechas con otro de sus compromisos, ya que desde septiembre de 2023 es director musical en el Nationaltheater en Mannheim (Alemania), donde, entre otros títulos, próximamente dirigirá el "Réquiem" y "La Traviata", de Verdi.
El lunes 30 de septiembre hubo reunión de directorio del Teatro Municipal de Santiago, pero no se entregaron mayores detalles sobre su salida. Sí trascendió que están molestos por el modo en que la oficializó, a través de un correo de escasas líneas. Los mismos directores han aclarado que no manifestarán reacciones, ya que esperan tener una reunión por Zoom con Roberto Rizzi Brignoli para poder emitir una opinión.
El jueves en la tarde, antes del ensayo general de la ópera, Carmen Gloria Larenas se reunió con los integrantes del conjunto para entregar algo de calma a esta agrupación, ya que -junto con la sorpresa de la renuncia de Roberto Rizzi Brignoli- el martes, en el frontis del teatro, los músicos despidieron al trompetista solista Cristóbal Rojas (32). La triste e inesperada muerte de este último integrante también ocurrió en la semana y los obligó a suspender el ensayo de "El elixir de amor" programado para ese día martes. Larenas le explicó a la orquesta que también para ella fue sorpresivo el alejamiento del titular y, entre otras ideas, planteó una posible consulta a los músicos sobre los directores que han pasado por el Municipal en el último tiempo, para que le comenten con quiénes han trabajado más a gusto.
Desde el sindicato de la Filarmónica de Santiago aclaran a "Artes y Letras" que "acabamos de firmar nuestra negociación colectiva, y nos sorprendió lo abrupto de la renuncia y lo escueto del comunicado de nuestro maestro". También revelan que han sido momentos muy complejos, en particular por la partida de Cristóbal Rojas, y que no han recibido una respuesta oficial del exdirector titular en torno a las razones de su alejamiento. "Eso sí, Roberto Rizzi Brignoli envió una nota de profundo dolor por el fallecimiento de Cristóbal y manifestó su energía, simpatía y cualidades humanas, lo que se le hizo saber a la orquesta", apunta el sindicato.
La imprevista renuncia del director titular también significó que la plana artística del Municipal de Santiago trabaje de manera inmediata en la búsqueda de los sustitutos para la temporada 2025 y que -tentativamente- está programada lanzar para mediados de noviembre tras las elecciones municipales. Ya se confirmó que el último concierto de este año de la Filarmónica (a partir del 4 de diciembre), "Canto a la libertad" (Novena Sinfonía, de Beethoven), será dirigido por el chileno Helmuth Reichel Silva, en reemplazo de Rizzi Brignoli. Era su único compromiso pendiente de esta temporada.
Los mismos músicos, eso sí, ven con optimismo los cambios para el 2025, "ya que tenemos a nuestro director residente Pedro-Pablo Prudencio, que podría asumir estos compromisos, además de otros directores chilenos", detalla uno de los integrantes de la Filarmónica, quien prefirió mantener su nombre en reserva. También advierte que -como en todas las orquestas del mundo- "el ambiente interno ha estado tenso y nadie niega que el propio Rizzi Brignoli es un director musicalmente exigente. Quizás algunos resintieron más su estilo, pero esto puede ser otra oportunidad para un recambio". A propósito de este tema, en carta a "El Mercurio" publicada este viernes, Carmen Luisa Letelier, Premio Nacional de Música 2010, aboga por una batuta de nuestras tierras para la Filarmónica, y enumera una lista de artistas con carreras consolidadas o ascendentes: Francisco Rettig, Max Valdés, Rodolfo Fischer, David del Pino, Víctor Hugo Toro, Alejandra Urrutia, Paolo Bortolameolli, Eduardo Browne, Pedro-Pablo Prudencio y Helmuth Reichel Silva.
Los desafíos que vienen
Otro integrante de la Orquesta Filarmónica de Santiago señala que "para todos fue una sorpresa la renuncia del director, pero no es algo extraño para nuestra orquesta. En 2019, el músico ruso Konstantin Chudovsky (entonces batuta titular) se fue del teatro, sin despedirse de nosotros. Él estuvo en todo su derecho, pero siento que le faltó una mayor empatía", dice.
Otros casos bullados en la historia de este patrimonial escenario de Agustinas ocurrieron, en 1986, con la polémica salida de Juan Pablo Izquierdo y -20 años más tarde- con Maximiano Valdés, quien asumió la titularidad en 2003, pero a fines de 2005 no renovó su contrato por los "despidos de 14 miembros de la Orquesta Filarmónica", explicó el propio Valdés en una entrevista a revista "Sábado".
El melómano Germán Reyes Busch suele asistir con frecuencia -desde hace más de tres décadas- a los conciertos en el Teatro Municipal. El también comentarista de discos de la Revista Átomo afirma que estamos ante un caso no tan extraño en el mundo de los teatros y orquestas. "Ciertamente, no es lo ideal para la dirección de ninguna institución perder de repente a un director tan sólido. Sin embargo, es una oportunidad muy interesante ver cómo se perfila un nuevo director titular, sus características, cómo se conectará con el medio, renovará repertorios y audiencias. En eso hay que concentrarse ahora". Junto con ello, lo define al músico italiano como "un director serio, estilista, de gran eficacia en la ópera, pero con un repertorio limitado y con poco o nulo interés en la producción local o contemporánea. La Filarmónica de Santiago está justo en el momento de plantearse otra forma de abordar el gran repertorio", concluye Germán Reyes.
El operático y abonado Claudio Cabezas considera que "el manejo técnico de la orquesta y la lectura de cada una de las partituras abordadas por el maestro Rizzi Brignoli fueron sobresalientes, por lo que sería una lástima retroceder en los logros alcanzados".
Estrella venezolana
Por estos días, varios músicos de la Orquesta Filarmónica comentan en los pasillos del histórico escenario de Agustinas que, dentro de todos estos días sensibles, ha sido un agrado poder tocar en la ópera "El elixir de amor", y en especial contar con un importante director invitado.
Se trata del venezolano Diego Matheuz (Barquisimeto, 1984), quien ayer tuvo su debut en el Teatro Municipal de Santiago con este encantador título belcantista.
Nacido bajo el alero del Sistema de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela -una impresionante cantera de talentos impulsada hace más de medio siglo por el fallecido músico José Antonio Abreu (1939-2018)-, con tan solo 26 años se convirtió en el director principal del Teatro La Fenice, en Venecia, uno de los coliseos más importantes del mundo. Si bien ya no mantiene la titularidad de este escenario, Diego Matheuz suele presentarse de manera habitual en La Fenice, en Berlín (Alemania), donde vive con su esposa y dos hijas, y hace unos meses tuvo su estreno, con extraordinarias críticas, en el Metropolitan Opera House de Nueva York, con "Carmen". El sitio The New York Classical Review publicó que, bajo la batuta de Matheuz, "la brillante orquestación de Bizet y las altísimas melodías se unieron para crear un arco dramático que iluminó y electrificó el drama".
"Tuve la dicha de hacer toda mi educación musical en el Sistema. Desde pequeño tuve contacto con el maestro Abreu", revela esta batuta, instalado en su camerino en el Municipal de Santiago. Añade que con Gustavo Dudamel (la estelar figura de la dirección venezolana) "somos grandes amigos. Hace poco nos vimos en Berlín y en Nueva York. Él estaba dirigiendo en el Lincoln Center y yo estaba debutando, la misma noche, en el Met. !Quién se iba a imaginar que dos barquisimetanos iban a coincidir en dos de los escenarios más relevantes del mundo¡", expresa el también director de la Seiji Ozawa Music Academy (Japón).
Sobre su debut con la Filarmónica de Santiago, dice que ha sido una sorpresa, "porque los músicos son muy buenos. Tienen toda la disposición para trabajar. Ha sido muy intenso, pero también fácil. Me llena de orgullo actuar en un teatro así en Latinoamérica", apunta.
De "El elixir de amor", considera que "es una ópera maravillosa, conocida por sus grandes melodías y con ese momento que todos esperan: 'Una furtiva lagrima'. Por eso es una de las más interpretadas en todo el mundo. Para mí también es mi debut con este título, y me estoy divirtiendo muchísimo", reconoce. Diego Matheuz adelanta que lleva seis meses estudiando la partitura, "buscando siempre los pequeños detalles del compositor italiano. Ahí está el secreto del éxito. Para mí es muy importante, más que el resultado final, el proceso de construcción".
-¿Qué destacaría del aporte musical de Donizetti?
"Toda esa escuela italiana incluye a grandes revolucionarios de la ópera. Estoy pensando en Bellini, Donizetti y Rossini, quienes establecieron una manera de cantar y de frasear muy únicas. Toda la música de Donizetti está llena de grandes riquezas y sus melodías tienen un gran poder, porque tienen el don de quedarse en el público. Estoy seguro de que quienes salgan de las funciones van a terminar tarareando. Donizetti fue, además, un gran orquestador, y un gran acierto es que sus melodías no son complejas. Al igual que Rossini, acá estamos ante una voz cautivadora con una melodía simple. Ese es uno de los aportes más relevantes del Belcanto ".
-¿Qué le parece la ambientación chilena?
"Para mí ha sido una sorpresa, y que se utilicen bailes chilenos, también. Es increíble, porque parece que Donizetti hubiera escrito su 'Elixir de amor' para esos bailes. Calzan perfectamente. La puesta en escena es muy bonita, está muy bien pensada, colorida, llena de pequeños detalles y de la simplicidad del campo. Puede ser el campo chileno, pero yo también pienso en el campo venezolano, en los Andes de mi país y que se inician en el estado de Lara. !Me encanta¡".
-¿Ha habido química con la Filarmónica?
"Absolutamente, y para mí es muy extraño, porque la mayoría de las veces no ensayo en español, pero ya me acostumbré. Ha sido una semana difícil para la orquesta, pero siento que he logrado una muy buena comunicación con todos ellos. !Un placer¡".
-¿La Filarmónica tiene en sus filas a varios músicos del Sistema?
"Este es un país que ha sido muy generoso con nuestra gente. Sé que algunos de mis compatriotas que han llegado a Chile no son de bien, pero la mayoría es gente trabajadora. Estoy muy agradecido de que instituciones como esta les abran la puerta a los músicos venezolanos. Hoy, donde vayas, en el mundo, hay un músico venezolano. Eso es muy bonito, porque habla de nuestra calidad, pero sería más bonito tenerlos en Venezuela. Uno de mis sueños, y de todos mis compañeros que migraron, es poder volver".
-¿Cómo ve a Venezuela?
"Soy optimista, pero siento que el gran problema de nuestro país es la educación frente a la dominación de ideologías incorrectas. El día en que nos demos cuenta y comencemos a trabajar en la educación, van a pasar varios años, pero es importante hacerlo. Ahora estamos en un proceso de incertidumbre y transición. Enero va a ser un momento clave".
PROGRAMARSE:
"El elixir de amor" Teatro Municipal de Santiago Director de la Filarmónica: Diego Matheuz Régie: Rodrigo Navarrete Escenografía e iluminación: Ramón López Hasta el 11 de octubre Más información en Municipal.cl Carmen Gloria Larenas: "Creo que sería un gran orgullo tener a un director chileno"El miércoles, en medio de la presentación de una innovadora maqueta de este histórico edificio a cargo del Campus Creativo de la Universidad Andrés Bello, Carmen Gloria Larenas, directora general del Teatro Municipal de Santiago, se refirió brevemente al estreno de la ópera "El elixir de amor" y a la renuncia del director titular.
"Con el maestro Diego Matheuz ya habíamos hecho un primer contacto para la temporada pasada, pero no fructificó por un tema de agenda, pero después él mismo nos planteó otra fecha. Conversamos y estamos felices, porque resultó !un gran talento¡", señala la ejecutiva.
Sobre Roberto Rizzi Brignoli, explica que "no he conocido su reflexión respecto a las razones profundas de su decisión. Es posible que, como sucede en cualquier equipo y en todos los teatros del mundo, las diferencias de opinión artística lo hayan desmotivado. O también, puede ser que el ejercicio de su cargo no fue lo que esperaba en esta etapa. Con Roberto siempre tuvimos una relación cordial", apunta. Larenas añade con el directorio están comenzando a definir el proceso de reemplazo, "analizando experiencias de diferentes teatros y orquestas para llegar a la mejor propuesta para nosotros. Nos daremos el tiempo adecuado, para definir todos los detalles". Y sobre los compromisos para el próximo año del exdirector titular, advierte que tenía a su cargo dos óperas y tres conciertos. "No queda mucho tiempo hasta el lanzamiento de nuestra temporada, así es que ya estamos buscando a los directores y directoras que tomarán ese relevo".
Carmen Gloria Larenas adelanta que en 2025 se conmemorarán los 70 años de la Orquesta Filarmónica de Santiago. "Es una fecha importante, y la orquesta está en un muy buen momento, con extraordinarios músicos. Estamos trabajando en una gran temporada de celebración".
-¿Podría ser el próximo director titular un músico chileno?
"Lo único que puedo decir es que estamos iniciando un proceso y que se tomará en consideración a todos los directores que cuenten con un perfil. Creo que sería un gran orgullo tener a un director chileno".