Planta de gas argentina entra en mantención y pone presión a costos del sistema eléctrico local

El sábado comenzó la mantención programada de la planta productora de gas, Mega, en la provincia argentina de Neuquén. Se trata de un proceso que tardará unas tres semanas y que ha generado preocupación en Chile.
En este lugar se realiza la separación y fraccionamiento de líquidos asociados al gas natural de Vaca Muerta, que posteriormente son exportados a Chile, por lo que se advierten posibles efectos en el sistema eléctrico local.
El Coordinador Eléctrico Nacional se ha mantenido en comunicación con las importadoras de gas trasandino, y en una reciente carta a la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC), indicó que las empresas no cuentan con información sobre la disponibilidad diaria del hidrocarburo, pero que se harán esfuerzos para obtener gas natural licuado (GNL) regasificado del mercado secundario, además de mantener al máximo los stocks de petróleo diésel.
Del total de gas que se ha utilizado este año en Chile, poco más del 40% viene desde Argentina. Es por esto que, según el académico de la Universidad Católica Cristián Muñoz, la indisponibilidad de suministro "deja al sistema dependiendo de la disponibilidad de las centrales a diésel, las que tienen una restricción local de distribución, ya que no hay suficiente logística para abastecer a todas las centrales".
Un informe elaborado por el Coordinador detalla que sacando toda la matriz a gas, junto con un aumento de la generación hidroeléctrica y el despacho de centrales en base carbón, se podría suplir la menor disponibilidad de gas argentino, y la baja disponibilidad de gas natural licuado en la zona norte y centro. "En términos de la participación por tipo de tecnología en el período de análisis, el aporte de energía de centrales de pasada y embalse alcanzaría 44%, eólico 9%, solar 26% y el parque térmico llega a 21%", estimó.
Con todo, dependiendo de la real disponibilidad de gas con que se pueda contar -ya que, por ejemplo, ayer seguía arribando el hidrocarburo-, los efectos de esta situación apuntan a un incremento en los costos de retiro para las empresas que comercializan energía con clientes libres y regulados, así como entre generadores, y un aumento en los costos de operación de unidades, que no son cubiertos por las inyecciones de energía valorizadas con su respectivo costo marginal.
A largo plazo
En paralelo, desde la Asociación de Gas Natural (AGN) enviaron una carta al Ministerio de Energía, abogando por una revisión de la norma que establece la calidad del gas importado, producto justamente del cambio de composición del hidrocarburo en Vaca Muerta, que cuenta con un poder calórico mayor al tradicional, pero que es utilizado sin problema del otro lado de la cordillera.
El gremio alertó que desde que se retomó la importación de gas argentino, estas detenciones "han tendido a aumentar en los últimos meses, tanto por la mayor presencia de gas no convencional en el sistema de gasoductos troncales de Argentina como por paradas técnicas de la planta de Mega". Agregaron que si bien la autoridad trasandina hará sus mejores esfuerzos para cumplir con la norma, aquello no está garantizado.
En este escenario, el gremio señala que "se podría afectar el suministro de gas a Chile, en un período en que se cuenta con permisos de exportación firmes por hasta 9 millones de metros cúbicos por día".
Importación Desde 2018 se retomaron los envíos de gas argentino a territorio chileno.