Celebran el día del guitarrón chileno
Cultores de distintas partes del país se reúnen en una fiesta nacional en torno a la "guitarra grande" en el Pueblito de Artesanos de Pirque.
Todos los caminos conducen a Pirque, la "cuna del guitarrón chileno". Con 25 cuerdas y otras denominadas "diablitos" y afinaciones propias, es el instrumento que acompaña a los cantores poetas. Es único en el mundo y por eso lleva en su nombre aquella denominación de origen. Este domingo, 20 guitarroneros del país estarán en el Pueblito de Artesanos de Pirque para mostrar las modalidades del canto a lo poeta.
Desde las 17:00 horas, y con entrada liberada, se desarrollará la décima Fiesta Nacional de la Guitarra Grande. "Antiguamente en el campo se hablaba de la guitarra chica, que era la guitarra, y la guitarra grande, el guitarrón. Mucho después se conoció como guitarrón chileno, a través de los investigadores", refiere Alfonso Ureta, cultor pircano, perteneciente a la Agrupación Guitarra Grande Pircana, que impulsa el encuentro.
Esta versión de la fiesta tendrá a guitarroneros de Santiago, San José de Maipo, Puente Alto y La Florida, además de zonas como Rancagua, Curicó, Coltauco y Putaendo. Incluso llegan desde Punta Arenas. "La panorámica es muy amplia hoy. En los años 60 los investigadores vieron que solo quedaban unos seis o siete guitarroneros en Pirque. Entonces en 1972 llevaron a Santos Rubio a hacer talleres en la U. de Chile por siete años. Así el guitarrón pasó de Pirque a Santiago. Si se mira la historia de cada cultor, todos llegan de alguna manera a Pirque. Por eso se dice que es la cuna del guitarrón", explica Alfonso Ureta.
El maestro Santos Rubio aprendió del pircano Juan de Dios Reyes, nacido a fines del siglo XIX. "Es uno de los patriarcas más reconocidos. No le quiso enseñar a Violeta Parra cuando andaba en busca del guitarrón en los años 50. Ella aprendió con otro maestro de Pirque, Isaías Angulo, el Profeta. La presencia de la mujer en el guitarrón, que no existía entonces, hoy también es una realidad", sostiene Ureta.
Entre las invitadas está la pircana Gloria Cariaga, quien fue compañera de canto del propio Santos Rubio, pero también mujeres que provienen de espacios sociales diferentes. Son la ingeniera agrónoma Natalia Giavelli y la educadora básica Maia Schmidt.
Ese fenómeno de ida y vuelta del guitarrón también se replica en la divulgación, con abundantes proyectos de investigación del instrumento, gestión de encuentros como la propia Fiesta Nacional de la Guitarra Grande, publicación de libros, discos y documentales, como el reciente "Canto a la guitarra grande", de Almendra Huequelef.
En él "se registra el proceso de creación de una obra para orquestas, coros y cuatro guitarroneros de Pirque: Juan Pérez, Fidel Améstica, Alfonso Ureta y Franco Cariz. La obra fue compuesta por René Silva y estrenada en la Casona El Cruceral e interpretada luego en la Catedral de Santiago", dice Huequelef. Es un proyecto de la U. de Chile, que involucró a más de cien intérpretes reunidos en tres orquestas universitarias y de un liceo pircano y otros tres coros de distintas facultades. El documental se encuentra disponible en YouTube.