Legado africano
Con el apoyo de un Fondart, la historiadora Alejandra Fuentes realizó una investigación sobre una colección única de mujeres afrodescendientes en miniatura, hechas a fines del siglo XIX y principios del XX, en cerámica, por artesanas que aprendieron el oficio con las monjas Clarisas, y que seguramente formaron parte del servicio doméstico del monasterio.
S on "miniaturas afrofemeninas", como las llama la historiadora Alejandra Fuentes, quien está en pleno proceso de edición del libro que lanzará a comienzos de 2025 y que tiene como protagonista a esta pequeña pero valiosa colección. Se trata de seis mujeres hechas en cerámica policromada que miden entre 8 y 10 cm, conservadas por la familia Flaño, dentro de un conjunto mayor de cerámicas, y hechas presumiblemente a fines del siglo XIX y comienzos del XX.
Entre sus trabajos de investigación se encontró con este conjunto que llamó su atención por la similitud con las piezas perfumadas que durante años se realizaban en el monasterio de las monjas Clarisas; sin embargo, son figuras de mujeres afrodescendientes y que, al contrario de las clásicas representaciones en pintura, no están desnudas ni con delantal, sino que bien vestidas. La hipótesis de la investigadora, cuyo estudio contó con el financiamiento de un Fondart, es que la servidumbre del convento aprendió la técnica y en la etapa de declive de la producción de las monjas, estas mujeres laicas instalaron sus talleres en el centro de Santiago para continuar con la tradición, pero sin ser perfumadas y con acento en la figura humana, con sus trajes y costumbres populares. De hecho, por las posturas de las figuras, podría ser que se representa alguna festividad con música y baile.
Para lograr el negro de la piel, Alejandra explica que en aquella época se recurría a varios productos y fórmulas: carbón vegetal, hollín, resina, semillas de algarrobo, etc.
Muy bien conservada, la colección perteneció anteriormente a Carlos Ossandón, quien adquirió las piezas en las ferias populares de la Alameda. "Llama la atención que este trabajo se haga en Santiago y no en el norte, donde se sitúan normalmente las poblaciones afrodescendientes", dice.
El libro tiene tres capítulos: antecedentes históricos que incluyen la esclavitud africana en Chile; la colección como tal con la descripción del conjunto, producción, autoría, iconografía, y las resonancias y significados actuales. Este último capítulo es muy importante, ya que se involucra a las comunidades afrochilenas en el análisis de las piezas. Y fue hecho con la colaboración de Alexandrine de la Taille, Thiare León y Constanza Cáceres.
El libro de RIL EditoresAlejandra Fuentes es historiadora y docente de la Universidad de los Andes. En los últimos años, su trabajo de investigación se ha centrado en la historia de los monasterios femeninos de Santiago, la esclavitud africana en el Chile colonial y las representaciones visuales de la población afrodescendiente en nuestro país. Ha participado en diversos proyectos de investigación archivística y de patrimonio financiados por entidades públicas y privadas, nacionales y extranjeras. Además, es coautora del libro Cerámica perfumada de las monjas Clarisas. Desde Chile al mundo , publicado por Ediciones UC en 2018.