Ayer se realizaron los últimos trabajos en la obra creada por el escultor Julio Carné; la Intendencia de Canelones inaugura la nueva plaza el miércoles 11.
La polémica nueva Plaza de los Fundadores del balneario Atlántida está casi lista. También está pronta la escultura sobre las familias fundadoras del balneario canario, fabricada con placas de cinco milímetros de acero Corten, un material especial cuyo óxido lo protege del proceso de oxidación.
Según pudo apreciar este martes El País, ya están terminados los cuatro bancos de hormigón que tienen grabados los nombres que tuvo el balneario, el nuevo sistema de luces y las fuentes de aguas danzantes.
Atlántida recibió varias denominaciones desde su fundación en 1911. Estos fueron: Balneario de los Médicos, Ensenada de Santa Rosa, Las Toscas y finalmente Atlántida. Esos cuatro nombres se encontraban en la fuente demolida por encontrarse en mal estado, según informaron jerarcas de la Intendencia de Canelones en una audiencia pública realizada el 24 de julio de este año en la plaza del balneario. En la tarde de ayer, el escultor Julio Carné supervisaba a tres obreros que realizaban los trabajos finales de la enorme escultura. Soldaron unas tapas de hierro y uno de los brazos del monumento.
Carné dijo que ver su obra terminada le generó una enorme emoción. "En el espacio hay planos y figuras que quedaron mejor que la idea original. El 90% de la obra me encanta. Considero que mi idea quedó plasmada en la escultura", dijo el artista a El País.
Explicó que la escultura tiene un tronco común que representa a las familias de los fundadores de Atlántida y los brazos son una visión del futuro de esos diferentes núcleos familiares.
El escultor dijo que, el lunes 2, cuando la escultura fue bajada a la plaza con dos camiones-grúas, llegó una vecina portando un cartel donde reclamaba por la recuperación de la vieja fuente en el lugar. A parte de esa pacífica manifestación, la colocación de la escultura no generó otro problema, agregó.
Carné advirtió que cuando los pobladores del balneario y los visitantes vean la obra y su entorno terminado no encontrarán en ella un mensaje político. "Verán que en la escultura no hay ideología alguna", subrayó.
El artista recordó que, en los últimos meses, existió un debate sobre si su obra tenía o no un trasfondo político. "Eso me dolió porque se me puso una etiqueta y estigmatizó. Algunas personas que hicieron eso fueron mis vecinos; yo vivía a dos cuadras de la Plaza de los Fundadores", afirmó Carné.
La escultura no fue un proyecto aislado del escultor. Junto con la arquitecta Paula Fernández, el artista también diseñó el espacio urbanístico de la Plaza de los Fundadores de Atlántida, la iluminaria, los caminos, los bancos y definió las ubicaciones de las plantas. Esas obras de infraestructura, dijo Carné, fueron realizadas por una empresa contratada por la Intendencia de Canelones tras un llamado a licitación.
En su página web, la Intendencia de Canelones informó que la inauguración de las obras en la plaza de Atlántida se realizará a las 18:00 horas del miércoles 11 de diciembre de este año.
La historia de la polémica
En la mencionada audiencia pública realizada en julio pasado entre jerarcas de la Intendencia de Canelones y vecinos, se desató una polémica que se arrastra desde que la comuna canaria decidió demoler la vieja y emblemática fuente de Atlántida.
En la reunión, los vecinos dijeron que la escultura tiene un tinte político porque se parece a "una hoz y un martillo", clásica simbología utilizada por el Partido Comunista.
Mientras que jerarcas de la intendencia, así como otros vecinos que respaldaron la iniciativa, replicaron que el monumento demolido estaba muy deteriorado, la plaza era un espacio público que prácticamente no era usado y que el diseño elegido no tiene relación alguna con una ideología política.
El País pudo comprobar ayer que las aguas seguían divididas en el balneario con respecto a la nueva plaza.
Miguel Ángel Chiellini, de profesión electricista, señaló que vio un "movimiento raro" en la Plaza de los Fundadores pero prefirió no ir a ver de qué se trataba. "Yo conocí a la vieja plaza de Atlántida. Estaba buenísima, pero nadie le hacía mantenimiento. Por eso estaba llena de mosquitos", dijo.
Chiellini recordó que la decisión de la Intendencia de Canelones generó polémica en el balneario. De todas formas, consideró que el cambio "es positivo" porque antes la "plaza estaba repleta de bichos".
Raquel de la Llana, de profesión empleada, señaló que no le gustó la nueva escultura. "Viví toda la vida en Atlántida. Por eso me gustaba más la fuente cuando estaba bien mantenida y funcionando con las luces prendidas".
De la Llana consideró que la Intendencia de Canelones deberá poner un cartel que explique qué significa la nueva escultura. "Son unos garabatos" de hierro, señaló.
Por su parte, la estudiante Camila Pacheco está a favor de la nueva Plaza. "Ver que Atlántida se va arreglando es algo positivo", señaló.
Juan Santiago, ejecutivo de marketing, está en desacuerdo con la escultura porque le parece "un símbolo comunista o de la Unión Soviética. Debieron restaurar la vieja fuente. Se juntó firmas para ello; yo no firmé pero sí mis padres. (...) La vieja fuente era mejor que lo que pusieron. Mirás (la escultura nueva) desde lejos y te das cuenta de que la fuente era mejor".