El Comercio, Perú
18 de diciembre de 2024
Opositores sostienen que la propuesta tendrá un impacto negativo en la zona. La comuna defiende la iniciativa y afirma que se están ?tergiversando muchas cosas?.
Por hernán medrano marin
Crear zonas de desarrollo residencial, comercial e industrial en el Valle Sagrado. Esta propuesta que busca concretar la Municipalidad Provincial de Urubamba ?a través de su plan de desarrollo urbano? con miras a la apertura del aeropuerto de Chinchero viene recibiendo cuestionamientos de un sector que se opone al cambio de zonificación planteado y que permitiría la construcción de grandes edificaciones.
El plan que desea aprobar el municipio para el período 2025-2035 pretende hacer el cambio de uso de la zona agrícola a una de densidad baja, media y alta, lo que permitiría las construcciones de 9 a 21 metros de altura.
Los principales opositores del proyecto han señalado que el cambio de zonificación fomentaría la congestión del Valle Sagrado, la pérdida de la riqueza cultural y paisajista, y la seria afectación del turismo en la región.
Juan Stoessel, CEO de Casa Andina y vicepresidente de la Cámara de Comercio de Cusco, asegura que esta iniciativa busca transformar un área cultural, arqueológica y ecológica única en ocupación urbana sin considerar el ?devastador impacto? que tendría en el patrimonio arqueológico, la biodiversidad y las comunidades locales. El arquitecto Carlos Rey calificó al plan como ?nefasto?, pues significa cambiar totalmente el carácter del Valle Sagrado, que es un área llena de cerros y campo.
?Desde el municipio?
A pesar de las críticas, el alcalde provincial de Urubamba, Ronald Vera, ha defendido el proyecto, indicando que no busca imponer dichos cambios, sino que lo planteado proviene de conversaciones con diversos sectores.
En diálogo con El Comercio, Giovanni Gómez, gerente de Desarrollo Urbano y Rural del municipio provincial de Urubamba, detalló que la propuesta de la comuna no está aprobada, sino en proceso de trabajo y en levantamiento de observaciones hechas por instancias como Copesco y la Universidad San Antonio Abad del Cusco. Precisó que no se plantea ninguna área de expansión ni cambio de zonificación. ?Se están tergiversando muchas cosas. […] Nuestro ámbito de intervención es de 35 km2. Este espacio de suelo ha sido ya construido?, aseguró.
Agregó que el 60% del área contemplada en el plan es de conservación, de protección de patrimonio cultural y natural; es decir, allí no se puede edificar ni urbanizar. También se tienen grandes hectáreas de zonas agrícolas destinadas al maíz. No se pretende urbanizar todas estas áreas, remarcó.
Para tener en cuenta
?Esta zonificación no es porque nosotros queremos imponer. Primero vemos el desarrollo cultural y ancestral que nuestros antepasados nos dejaron y tenemos la obligación de preservar?, declaró el alcalde Ronald Vera.
