Caja de la Nación se contrajo: cayó más de 60% el último mes
La caída en el recaudo tributario y el aumento del gasto público le siguen pasando factura a las cuentas del Estado, que parece haber perdido otra vez la liquidez que mostró a finales de octubre y nuevamente se acerca a los niveles más bajos de los últimos 20 años, prendiendo las mismas alertas que se observaron en mayo
La caída en el recaudo tributario y el aumento del gasto público le siguen pasando factura a las cuentas del Estado, que parece haber perdido otra vez la liquidez que mostró a finales de octubre y nuevamente se acerca a los niveles más bajos de los últimos 20 años, prendiendo las mismas alertas que se observaron en mayo. Según los reportes del Banco de la República, los recursos de la Nación en las cuentas oficiales, que se miden por los Depósitos Remunerados del Tesoro Nacional (DTN), con corte al pasado viernes 6 de diciembre, se ubicaron en $6,4 billones, lo cual inicialmente se traduce en una caída de $1,2 billones respecto al día anterior y de más de $9 billones frente a como inició la semana. "El viernes 6 de diciembre el saldo de las disponibilidades de la DTN en el Banco de la República fue de $6,4 billones, lo que representa una disminución de $7,3 billones frente al viernes 29 de noviembre de 2024. Durante la semana mantuvo en promedio $12,2 billones, es decir $5 billones menos que la semana anterior", dice concretamente el informe. Este es el segundo nivel más bajo desde la primera semana de mayo, donde este indicador alcanzó a caer hasta los $2,3 billones, su punto más bajo del siglo en curso. Para entender mejor el apretón de caja, hay que decir que hace un año, para estas mismas fechas, los saldos en caja rondaban los $18,5 billones. Avances perdidos Si se tiene en cuenta que hace poco más de un mes (finales de octubre), las cuentas de la Nación estaban en $26,8 billones, su mejor punto del año, aunque por debajo del promedio, se puede decir que durante noviembre se perdieron los alivios que trajeron para la caja del Estado los recursos que normalmente llegan por declaraciones de renta. Debido a esto, nuevamente el Gobierno queda contra las cuerdas, puesto que la plata con la que cuenta para implementar los programas sociales que planeó se ve limitada y se queda sin margen de maniobra para estrategias más allá de los recortes presupuestales y la subejecución que ya viene implementando. Hay que decir que si bien el Ministerio de Hacienda ya dijo que recortará $33 billones del Presupuesto General de la Nación, los expertos sugieren que este ajuste debería superar los $50 billones, lo cual se realizaría por medio de una estrategia de no ejecución de las cuentas de gasto, que ponen a la inversión como la más sacrificada. Si se tiene en cuenta que el 6 de noviembre los depósitos del Tesoro Nacional estaban en $19,2 billones y desde allí cayeron a los $6,4 billones que marcó el 6 de diciembre, es válido decir que estas cuentas se redujeron un 63,1% durante el último mes. En este punto hay que decir que generalmente en estas fechas se tienden a contraer los recursos, no obstante, los niveles actuales preocupan al mercado. ¿Qué pasó? Para entender mejor esta situación, Portafolio conversó con Camilo Pérez, jefe de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá, quien empezó resaltando que la constante del 2024 en las cuentas de la Nación ha sido ubicarse en los niveles más bajos, lo cual no es bueno porque, en caso de una emergencia, obligaría a recurrir a la deuda. "El tema de caja del Gobierno ha estado complicado todo el año. El Gobierno se ha mantenido muy cerca de los mínimos de cada momento del año para los últimos 20 años aproximadamente. Esto es resultado de un bajo recaudo tributario, al mismo tiempo que los gastos se mantienen creciendo a un ritmo no despreciable", dijo. Pérez agregó que "si bien el Gobierno ha hecho un esfuerzo grande para solventar la situación, pues al final de cuentas el resultado de la caja es eso. Es una difícil situación fiscal en general y diría que al final todo parte de una planeación quizás demasiado optimista", situación que, desde su perspectiva, debería poner a pensar al Gobierno. El jefe de Investigaciones Económicas del Banco de Bogotá hizo énfasis en que el hecho de que los impuestos no estén cumpliendo con la expectativa, reafirma que las expectativas eran demasiado altas y que esto terminó incidiendo de una forma importante, ya que los gastos se planean con base en los ingresos. "Las consecuencias ya se están viendo, en el primer semestre del año tuvimos un gobierno que aportaba de manera importante al crecimiento y ya en los meses más recientes para los cuales tenemos información oficial, lo que se está viendo es que el aporte del gobierno a la economía es mucho menor en la medida en que efectivamente está restringiendo su gasto y está subejecutando para poder mantener una situación de caja aceptable y en definitiva cumplir con la regla fiscal", destacó. Carf actualiza cuentas Si bien las cosas nuevamente se volvieron a complicar, en lo que resta del año no hay esperanzas de mejora, dado que según el más reciente balance del Comité Autónomo de Regla Fiscal, el recaudo de los dos principales tributos internos, renta e IVA, está por debajo de la ejecución proyectada a octubre. "El recaudo de tributos externos está por encima de la ejecución proyectada por el Comité a octubre. Así mismo, el acumulado a octubre, el recaudo bruto está $9,9 billones por debajo de la ejecución proyectada, aumentando la brecha frente a los $8,8 billones que se acumulaba a septiembre", explicaron. Esta autoridad agregó que "la disponibilidad de caja en pesos ha permanecido por debajo de su promedio histórico a lo largo del 2024 y al cierre de noviembre se ubicó en $13,7 billones, cerca del mínimo histórico de noviembre desde 2012".