Figuras de Alajuelense pidieron revisión del marco norte, donde ellos detectaron una irregularidad,
El duelo entre Alajuelense y Herediano inició con polémica, porque, según dieron a conocer en la transmisión televisiva, uno de los marcos del estadio Carlos Alvarado estaba algunos centímetros por encima de lo permitido por el reglamento. Ante esto, en la Liga reclamaron e insistieron en que el partido no se debía jugar hasta que el problema fuera corregido.
Según el reglamento, la distancia entre el suelo y el travesaño debe ser de 2.44 m, pero se detectó que el marco norte no cumplía con el requisito. En FuTV destacaron que quien detectó la falla fue Leonel Moreira, arquero de Alajuelense.
Con la entrada de los planteles al terreno de juego, los reclamos de figuras como Bryan Ruiz (asistente técnico) y Alexandre Guimaraes (entrenador) no se hicieron esperar, ya que consideraban que la situación no se había corregido.
"No se debería jugar si el marco está en esas condiciones, pero bueno", dijo Ruiz.
En la Liga insistieron una y otra vez en el tema, por lo que también le pidieron al cuerpo arbitral que revisara la situación en el entretiempo.
Antes de que comenzara el partido, el cuarto árbitro, Steven Madrigal, se acercó a la zona norte del estadio con una silla y sus colegas guardalíneas para medir el marco, y pidieron que se le hiciera un ajuste antes del inicio de la actividad deportiva.