El Rey todavía no selló su arribo al aurinegro, pero está encaminado y eso no solo ilusiona a los dirigentes, los hinchas también pueden empezar a recordar parte lo de que fue su pasaje.
Entre la jornada del debut y su último partido en Peñarol pasaron 450 días, pero prácticamente que se podría considerar que fue un año porque David Terans jugó en el aurinegro desde febrero de 2020 a mayo de 2021 con muchas vivencias deportivas y también fuera de la cancha, como por ejemplo una pandemia que detuvo la actividad.
Llevaba dos partidos en su nuevo club cuando el Campeonato Uruguayo, y también el mundo, se detuvo casi por completo. Tras cinco meses de inactividad, al igual que sus compañeros, volvió con gol y como si eso fuera poco, con un tanto clásico ante Nacional.
Fue tal vez la primera sonrisa que le pudo sacar a los hinchas mirasoles, que poco a poco se iban a acostumbrar a hacerlo.
Y cómo no hacerlo si mientras él estuvo en el club se convirtió en el máximo goleador de la institución, sin ser un delantero centro y poniéndose el traje de figura en un plantel al que de todas maneras se le escapó el Campeonato Uruguayo.
De todas maneras, los números marcaron que el Rey, como se lo conoce, marcó 18 goles en los 43 juegos en los que defendió al aurinegro, los mismos que en ese mismo tiempo anotó Agustín Álvarez Martínez, lo que resalta más por lo que significó el canario en ese plantel tras su irrupción goleadora.
A eso hay que sumarle que Terans también aportó nueve asistencias.
Pero en materia de goles, no solo sumó en cantidad, sino también en calidad porque no fue uno solo que le marcó a Nacional, sino que lo hizo por duplicado porque al tricolor lo enfrentó tres veces y le hizo dos tantos ya que al que anotó en el Torneo Apertura hay que sumarle el que hizo en el Intermedio en aquel partido que terminó 3-2 con tanto de Ariel Nahuelpan sobre el cierre del mismo en el Campeón del Siglo.
Boston River, Cerro Largo, Liverpool, Danubio y Fénix también sufrieron por duplicado al atacante que dejó una huella muy importante en el club.
La situación escapó de sus manos, incluso de las de Peñarol, al que le solicitaron una cifra cercana a los dos millones de dólares para que Terans continúe en el club. Athletico Paranaense le acercó dicha oferta a Atlético Mineiro, el Galo la aceptó y, tal vez un tanto a regañadientes, Terans se marchó nuevamente al fútbol brasileño.
En el Furacao mostró una gran versión y no en vano continuó con el nivel mostrado en Peñarol alcanzando los 31 goles y 27 asistencias en 129 juegos, pero hubo uno de esos goles y una de esas asistencias que calaron hondo porque fueron precisamente ante el Mirasol cuando el destino quiso que lo enfrentara a su exequipo en las semifinales de Copa Sudamericana, en la que terminó siendo campeón en Montevideo contra el Red Bull Bragantino.
Que su nombre vuelva a estar en el radar aurinegro y que la negociación entre los clubes esté cerrada (solo falta el acuerdo del jugador con su club), reavivó muchas cosas y entre ellas la participación en aquellos tantos con el equipo norteño que terminaron eliminando al Mirasol de Mauricio Larriera, pero también es cierto que sacaron a relucir los 18 tantos y nueve asistencias conseguidos con tres entrenadores distintos (Diego Forlán, Mario Saralegui y Larriera) en Peñarol, los dos festejos clásicos y también el año en el que Terans fue la gran figura.
Hoy su presente marca que en el último año y medio el mediapunta disputó 1270 minutos repartidos en 29 partidos y en dos clubes ya que lo hizo en Pachuca de México y Fluminense de Brasil. En ese margen de tiempo anotó un gol y dio una asistencia y ambos fueron vistiendo la camiseta del conjunto norteño del que llegaría como cedido por un año.
El País, Uruguay
30 de diciembre de 2024
