Inesperada muerte de Acuña sacude al fútbol suramericano
EL PAÍS DE URUGUAY @ELTIEMPO
La salud mental volvió a golpear a la puerta del deporte en una tragedia: la de Mathías Acuña
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La salud mental volvió a golpear a la puerta del deporte en una tragedia: la de Mathías Acuña. El futbolista uruguayo de 32 años tomó una trágica decisión apenas unas horas después de haber regresado a Ecuador para sumarse a la pretemporada del Mushuc Runa, equipo de la ciudad de Ambato que le había renovado contrato por un año más. Y de afuera todo es difícil de entender o aceptar, sobre todo cuando unas horas antes de quitarse la vida, el delantero surgido en El Tanque Sisley habló con la prensa en el aeropuerto y se expresó entusiasmado y, sobre todo, agradecido con el club que lo respaldó en todo momento en una delicada situación personal. Mathías había sido noticia en los últimos días de diciembre por una denuncia de violencia de género por parte de su expareja. Eso derivó en que la Justicia de Ecuador le pusiera al futbolista uruguayo una tobillera electrónica. Acuña se defendió a través de sus redes sociales: "Primero hay que informarse bien sobre por qué te colocan la tobillera electrónica. La jueza me explica que lo hacen por medida cautelar; no por ser culpable. En este país las leyes son así. Te ponen la tobillera por todo lo que sucedió anteriormente, en otros casos, y para ellos tener un control, pero repito: no por ser culpable", relató. Y agregó: "Todo esto me sirvió para terminar esta relación tóxica de años. La otra parte nunca aceptó que no quería estar más con ella y se le ocurrió poner mentiras. Me da lástima, porque sí hay mujeres sufriendo de verdad por violencia de género. Estoy tranquilo, rodeado de los míos, que me conocen y saben lo que soy. Nunca violenté a nadie". Y con el regreso a Ecuador, la confianza de Mushuc Runa, el apoyo de sus compañeros y el amor de su familia, Mathías se mostró ilusionado con un nuevo año, pero nadie sabía todo lo que en su cabeza rondaba. Nadie pudo ayudarlo a tiempo y tomó la peor de las decisiones, que hoy lamenta toda una familia, un gran grupo de amigos y el mundo del fútbol, que también sintió el golpe, ya que no es la primera vez que ocurre un hecho similar. Si bien no hay información oficial, todo indica que Mathías Acuña se suicidó y lo hizo en el hotel que la institución había puesto a disposición de los futbolistas en la pretemporada. El presidente de Mushuc Runa, Luis Alfonso, habló con Ovación y lamentó el trágico episodio: "Estamos muy tristes por Mathías y por toda la situación. Desconocemos principalmente los motivos graves, pero sí conocemos que tuvo problemas familiares en Uruguay. A pesar de eso, sabíamos que no tenía inconvenientes legales para viajar a Ecuador y es por eso que el club le ratificó la confianza y estábamos por suscribir el nuevo contrato". "Ahora hay que esperar la correspondiente investigación con las autoridades competentes, pero se presume un suicidio", explicó el dirigente para luego agregar: "El club se hará cargo de la llegada de la familia de Mathías a Ecuador para que esté presente aquí y también colaboraremos junto a nuestros abogados con la repatriación inmediata conforme a lo que indiquen las leyes". "Estamos muy dolidos por toda esta situación y enviamos las más sinceras condolencias a familiares y amigos de Mathías", cerró diciendo Luis Alfonso a El País. Lo cierto es que la congoja es grande, y no solo en Ecuador. También en Uruguay. La salud mental se cobró otra vida y sigue siendo un tema central que interpela a todos.