Santiago pide "un poco más de tiempo" para controlar comercio ambulante en Lastarria
Especialmente en las tardes las calles del barrio se ven repletas de comerciantes, y vecinos denuncian que también ha proliferado el microtráfico y los robos.
El barrio Lastarria, reconocido circuito bohemio y cultural de la comuna de Santiago, no queda exento de un fenómeno ampliamente extendido en la Región Metropolitana: el comercio ambulante, que aunque común en esa zona, se ha extendido de tal manera que ha generado el malestar de quienes residen en sus alrededores, e incluso a sus visitantes.
Desde temprano, los comerciantes comienzan a estirar sus paños en el suelo para acomodar los artículos para vender en el día, pero es durante la tarde cuando la situación se vuelve más compleja. Así lo han evidenciado múltiples cartas al director publicadas por "El Mercurio" durante la última semana.
Héctor Vergara, presidente de la Junta de Vecinos del Parque Forestal, sostiene que "las personas van a pasarlo bien, a comprar, a disfrutar de los espectáculos callejeros, pero nunca se pone en relevancia el hecho que hay vecinos ahí habitando el espacio, y ellos son los principales afectados de este fenómeno".
"Nunca había habido tanto comercio en esta zona como ahora, agudizado por supuesto en las horas de la tarde, a partir de las siete", agrega Vergara, añade que, desde esa hora ya es "realmente muy difícil transitar por la vereda".
Un comerciante establecido, que lleva más de 50 años trabajando en el lugar, dice que la situación es "un horror". "Además del tema del comercio ambulante, también se producen robos y consumo de drogas. El otro peligro son los motochorros, que viven robando por el sector", explica el vendedor.
"Desde hace un par de años que empeoró todo, y cambió además el estilo del comercio, que antes era solo arte, libros, artesanía. Hoy no es así, venden hasta droga", agrega.
"Yo me encierro en la tarde, no salgo a ninguna parte. No debería ser así, pero dadas las condiciones, uno no se puede arriesgar", añade una adulta mayor que vive en el barrio desde hace 40 años.
26 barrios
Walter Olivares, artesano que trabaja en la zona desde hace 11 años, explica que, en total, son aproximadamente 50 los comerciantes que poseen permiso municipal para trabajar en el barrio. El resto, no lo posee, y se ubica en cualquier lugar disponible de la calzada para ofrecer los más variados productos.
Arturo Urrutia, director de Prevención y Seguridad Comunitaria de la Municipalidad de Santiago, explica que "nosotros queremos recuperarlo (Lastarria), pero también queremos decirle a la comunidad que son 26 barrios que tiene la comuna de Santiago y tenemos barrios emblemáticos como Franklin, Meiggs y otros, que por cierto necesitan también el despliegue".
"Les quiero decir que desde los primeros días de esta administración, que lleva un poco más de un mes, hemos hecho múltiples intervenciones, hemos ocupado más de 250 funcionarios", y agrega que "sabemos que faltan cosas por hacer, pero por favor dennos un poco más de tiempo".
La mano dura de Puerto Montt
Desde el 3 de enero comenzó a regir el perímetro que fijó la Municipalidad de Puerto Montt y que prohíbe el comercio ambulante en 36 cuadras del centro de la ciudad.
El municipio explicó que esta medida nació en 2019, sin embargo, postergó de manera sucesiva, y pese a que la última prórroga venció el 16 de diciembre de 2014, el alcalde Rodrigo Wainraihgt otorgó un último plazo hasta el 2 de enero para que ambulantes y sus familias realizaran ventas en Navidad y Año Nuevo. Finalmente, el 3 de enero comenzó a operar definitivamente la medida, que ha generado protestas.
Ayer el concejo aprobó una modificación a la ordenanza que sanciona quienes compren en el comercio ambulante, y fijó multas de entre 0.5 UTM ($33.714) hasta las 5 UTM ($337.145).
Puerto MonttEste año comenzó a regir el perímetro de exclusión del comercio ambulante en 36 cuadras del centro de la ciudad.