Filme con un elenco de lujo cierra hoy el Festival de Cine Wikén

Luego de una carrera de dos décadas dedicado al documental -con la que obtuvo dos nominaciones al Oscar por "El acto de matar" (2012) y "La mirada del silencio" (2014)-, Joshua Oppenheimer (50) encontró la idea para aventurarse en su primer largometraje de ficción. Estaba en Japón investigando el caso de una familia adinerada de ese país que había construido un lujoso búnker de supervivencia (que tenía hasta piscina) con la idea de hacer un documental al respecto, pero pronto aquella idea evolucionó. El resultado se llama "The end", un poderoso filme musical que debutó con aplausos en el pasado Festival de Cine de Toronto y que hoy se exhibe en la última jornada de la edición 23 del Festival de Cine Wikén, presentado por "El Mercurio", Vitacura y Costanera Norte.
Para la película, Oppenheimer logró convocar un elenco de lujo, encabezado por Tilda Swinton (ganadora del Oscar por "Michael Clayton") y Michael Shannon (nominado a la estatuilla por "Solo un sueño") y que también integran George MacKay ("1917") y Moses Ingram ("Gambito de dama"), entre otros.
Ambientado en un mundo posapocalíptico, el filme cuenta la historia de una familia adinerada -integrada por personajes identificados solo como Madre, Padre e Hijo- que parece haber tenido algo que ver en el colapso del planeta y que ha vivido por años encerrada en un enorme búnker rodeado de lujos, incluidas invaluables obras de arte, y que conviven junto a otros personajes alrededor, como una Amiga que hace de cocinera, un Mayordomo y un Doctor. La vida se altera cuando sorprendente llega al búnker otra sobreviviente, conocida como la Chica. Hijo, que no ha conocido otra vida o persona que aquella que ha habitado dentro de esas cuatro paredes, encuentra en esta visitante la posibilidad de experimentar el amor.
La opción de contar esta historia en clave musical nació muy pronto en la génesis del proyecto. Oppenheimer ha dicho: "A través de las canciones, la familia lucha por convencerse de que han tomado las decisiones correctas en la vida. Luchan por justificar sus acciones para aliviar sus arrepentimientos y esa es la línea que conecta esta película con mi trabajo anterior sobre la culpa, la vergüenza, la negación y el silencio. En este caso, la labor de contar historias surge a través del acto desesperado de cantar, de inventar y aferrarse a excusas a través de la canción y de alguna manera ser capaz de convencerse a uno mismo de esas excusas si la música es lo suficientemente hermosa y convincente".
En el filme, todos los actores cantan en vivo, directo en el momento en que están filmando sus escenas. Oppenheimer participó en la escritura de las canciones junto a los músicos Marius de Vries y Joshua Schmidt. El director ha contado: "Ese proceso fue muy riguroso, insistiendo en que cada letra fuera interpretada dramáticamente. Son canciones que surgen de momentos de crisis para los personajes y se hizo evidente que no podíamos volver a grabarlas. La forma en que trabajo con los actores es animándolos a que me regalen momentos auténticos. Las canciones tenían que surgir libres y sin restricciones".
CoordenadasEl 23° festival de Cine Wikén finaliza hoy en el Parque Bicentenario de Vitacura. La película se exhibe a las 21:45 horas y la apertura de puertas será a las 19:00 horas. Las entradas se venden a través del sitio www.festivaldecinewiken.cl. Los precios son $10.000 (general) y $7.000 (Tarjeta Mi Vita, Club de Lectores El Mercurio y clientes Costanera Norte con su cuenta al día).