Uno de los jóvenes talentos del club está muy bien conceptuado por el cuerpo técnico que encabeza Martín Lasarte. Ya tuvo participación en Primera División.
"Rodrigo Mederos es un buen futbolista. Y buen pibe. No tiene tanto marketing quizás". "Es un jugador que perfectamente puede ser titular en el equipo". Las apreciaciones son de Martín Lasarte (en primer lugar) y de Flavio Perchman (en segundo orden). Y, además de pertinentes, son recientes y se tejen desde una sintonía que es compartida.
Tanto el entrenador de Nacional como el vicepresidente del club tienen claro que están ante la presencia de un jugador, que, pese a su corta edad (19 años), no da muestras de inmadurez al jugar ni pedir la pelota. Más bien todo lo contrario.
Su repentina aparición en la pretemporada hizo que de golpe y porrazo, el área deportiva -en común acuerdo con la dirigencia- declinara la posibilidad de sumar a dos mediocampistas y concluyera: "O traemos a César Araújo o a Luciano Boggio". De pensar en dos, el razonamiento se empezó a volcar por uno u otro. En castellano: pasó a haber lugar para uno solo.
Como lo de Araújo no prosperó, porque Orlando City decidió descartar la venta por US$ 1.000.000 y no lo dejó salir en este mercado de pases, entonces la opción más viable fue la de Boggio, que tuvo ayer su segundo entrenamiento después de una dilatada negociación con Lanús, que cerró en la compra del 80% de su ficha por US$ 900.000.
Pero, dada su reciente incorporación al plantel y las referencias primarias que dieron desde Nacional sobre él, su inclusión en un equipo titular para jugar el clásico parece ser muy prematura.
https://x.com/Nacional/status/1887237821192098095Las cartas vistas de Mederos y la buena consideración inicial que tuvo el cuerpo técnico sobre él le dan fuerzas a la posibilidad de que se termine quedando con ese espacio.
Hay, además, dos elementos que suman puntos a su favor y uno es que Franco Catarozzi, si bien recién se está adaptando al salto de un equipo menor (Montevideo City Torque) a un grande, todavía no encontró su mejor nivel ni tuvo la regularidad que se esperaba de él. El otro punto es que Lasarte seguramente mantendrá el mismo sistema táctico que paró todas las veces en las que se enfrentó a Peñarol desde su regreso: 4-3-3.
Ya en la previa al primer clásico del año, en filas tricolores habían coqueteado con la posibilidad de que Mederos jugara como titular, pero, como se sintió en el amistoso con Olimpia, prefirieron no arriesgarlo esa vez.
Consultado por Ovación sobre cómo lo visualiza para jugar un partido de este tipo, Diego Gonzo -encargado de la residencia de juveniles del club- lo definió como un "chiquilín ejemplar", que "representa los valores de Nacional" y al que le sobra capacidad para estar a la altura de lo que el presente le exige: "Hizo todas las formativas con nosotros. Vino en Séptima. Hizo todo el colegio, terminó el bachillerato en el Palotti y siendo un buen estudiante. Fue capitán de la residencia y se terminó yendo por una cuestión de edad, sino lo seguiríamos teniendo porque es un modelo que representa los valores del club. Me alegra no tener que verlo tan seguido ahora. No porque se porte mal, sino porque sé que tiene todas las condiciones para que le vaya bien en Primera".
A su lado, hay grandes chances de que Lasarte le vuelva a dar el voto de confianza al Ojito Nicolás Rodríguez, un jugador al que en su momento pidió y hoy lo tiene como uno de los "comodines" más útiles de la interna. El inamovible en ese mediocampo será Christian Oliva, uno de los bastiones del equipo durante el pasado año y a quien Perchman ya perfiló, junto a Sebastián Coates, como una posible figura de Nacional en el Torneo Apertura.