El delantero nigeriano volvió a jugar en el estadio de Nacional donde se lo vio dejar todo en cada pelota y protagonizó algunos cruces con los zagueros locales.
No fue un partido más para Christian Ebere. El nigeriano volvió a jugar en el Gran Parque Central tras su salida de Nacional cuando directivos e integrantes del cuerpo técnico le dijeron que no iba a jugar en el club en 2025.
En la semana se instaló la polémica para saber si podía jugar o no, aunque desde el club coloniense le confirmaron a Ovación que podía hacerlo y "estar a la disposición del entrenador".
Con todo esto, Ebere saltó al GPC. Saludó a sus excompañeros que estaban en el campo de juego y a los que se encontraban en el banco de suplentes. Incluso a su exentrenador, Martín Lasarte.
Arrancó el partido y el nigeriano se transformó. Estuvo muy metido. Con ganas de demostrar y en la primera pelota que tocó quiso tirarle un caño a Christian Oliva en el minuto tres. No salió.
Corrió todas las pelotas que le lanzaron y se peleó con los dos zagueros locales: Sebastián Coates y Julián Millán. Aunque al primero casi nunca le pudo ganar.
Lo mejor del delantero se vio cuando se juntó con los otros dos atacantes del Pata Blanca: Pablo García y Diogo de Oliveira. Con el primero realizaron buenas combinaciones para poder complicar a toda la defensa tricolor.
En los pies de Ebere nació el gol visitante. En el minuto 18, Plaza Colonia realizaba una buena conexión de pases y el esférico le llegó al delantero de 26 años, quien metió una pausa, levantó la cabeza y le puso un estupendo centro a la cabeza de Diogo para decretar el 1-0 momentáneo.
El nigeriano no dudó en festejarlo con todos sus compañeros. Plaza Colonia ejecutaba a la perfección su plan, ganaba y Ebere se daba el gran gusto de tener una buena noche donde fue su casa durante el 2024.
En el segundo tiempo Ebere no aflojó. Se movió de una banda a la otra con el afán de poder ganarle las espaldas a los defensores.
Cada vez que se encontró con García se vio lo mejor de Plaza Colonia y desnudó algunas falencias en la última línea tricolor. Asimismo, muy pocas veces pudo pasar a una de las grandes figuras de la noche: Coates.
En el minuto 75 dejó la cancha. En su lugar entró el marfileño Yacouba Meité para poder reforzar el mediocampo visitante.
Ebere salió y lo hizo sabiendo que dejó todo en un partido que, sin dudas, fue especial para él.
El País, Uruguay
23 de marzo de 2025
