Andrew Bargsted estrena filme planteado en tiempo real

Ha pasado más de una década desde que Andrew Bargsted (31) filmó las películas que lo instalaron en el mapa audiovisual: "Nunca vas a estar solo", de Alex Anwandter, y "Mala junta", de Claudia Huaiquimilla.
Hoy es uno de los actores más solicitados del panorama local. "Ha sido un camino largo", dice Bargsted. "Afortunadamente he tenido la posibilidad de trabajar con gente inteligente y he podido además mantener esas relaciones artísticas en el tiempo. Ahora siento más confianza en mi trabajo, pero también hay otras cosas que uno mantiene, como ciertos ideales o sueños transformadores a propósito del arte que siempre me van a movilizar", explica.
Tras filmes destacados como "Algunas bestias", "Mis hermanos sueñan despiertos" y "Penal Cordillera", Bargsted regresará a la cartelera este jueves con "Todos somos justos", el nuevo filme del cineasta Carlos Leiva ("El primero de la familia"). Mezcla de thriller y drama social, la cinta se plantea como un relato en tiempo real al interior de la casa de Claudia (García), donde vive junto a sus dos hijos (Victoria de Gregorio y Rodrigo Walker) y un esposo ausente. Invitado a cenar también está Jaime (Bargsted), profesor particular del hijo y excompañero de la universidad de la hija. Es de origen humilde y ve cómo el lugar es invadido por una pandilla de asaltantes liderados por el violento James (Germán Díaz). En menos de una hora y media se desarrollará una tensa dinámica en que se revelarán identidades y secretos.
"En primer lugar, me llamó la atención el hecho de que la historia sucedía en tiempo real y que se planteaba en varios planos secuencia, lo que ya era un desafío. Eso resultó muy entretenido y también muy complejo, porque requería de muchos ensayos. También me llamaron la atención los temas que estaban involucrados en la película, la discusión sobre la justicia y el choque de clases sociales en una situación límite", señala Bargsted.
Filmada durante nueve noches, con número similar de días para ensayar las escenas, el actor admite que fue un desafío este rodaje. "Fue súper extenuante, porque es un trabajo que consiste en repetir situaciones muy largas muchas veces, más encima en jornadas nocturnas. Un plano secuencia quiere decir que no hay cortes, entonces hay una coreografía que tiene que ser seguida al pie de la letra, como uno lo haría en el teatro, sin dejar de actuar. Y creo que nuestra respuesta a eso fue mantener, fuera de cámara, un ambiente entretenido y la verdad es que lo pasamos súper bien. Nos reímos mucho, lo que creo era necesario para equilibrar la energía del rodaje, porque estábamos representando situaciones bastante violentas. Fue desafiante, pero creo que para todos fue un proyecto bien especial", dice.
Y sobre el mensaje de la cinta, Bargsted afirma que le gustaría que la película funcionara como un choque, pero también como un encuentro. "Creo que en una situación límite como esta, donde hay una profunda asimetría, aparecen momentos en los que estos personajes dialogan y muestran sus realidades al otro. Ahí hay algo muy interesante y contingente. Finalmente, pienso que esta película es también una invitación a hacerse preguntas en lugar de entregar respuestas y da al espectador el trabajo de tomar partido y también de hacer un análisis sobre la sociedad que lo rodea", sostiene.
Bargsted filmó el año pasado la nueva película del director Sergio Castro, "Il cileno", coproducción chileno-italiana, filmada en ese país y Suiza, y además se prepara para comenzar su trabajo en la próxima teleserie vespertina de Mega. Actualmente está rodando "La plaga", la próxima cinta de la dupla León & Cociña.