La extorsión y el vandalismo siguen creciendo en Bogotá
¿Cómo está la seguridad en Bogotá? Esa es una de las preguntas más frecuentes entre los ciudadanos de la capital, y para responderla, la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB) presentó los resultados de la Encuesta de Percepción y Victimización (EPV) 2024
¿Cómo está la seguridad en Bogotá? Esa es una de las preguntas más frecuentes entre los ciudadanos de la capital, y para responderla, la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB) presentó los resultados de la Encuesta de Percepción y Victimización (EPV) 2024. Este estudio, considerado uno de los más completos del país por su alcance y profundidad, incluyó en esta edición a las 19 localidades urbanas de Bogotá y, por primera vez en sus 26 años de historia, también a 16 municipios de Cundinamarca. En total, se encuestaron de manera presencial a más de 26.000 hogares: 19.345 en Bogotá y 6.710 en el departamento, lo que la convierte en una de las pocas encuestas en Colombia con cobertura nacional tan amplia. Uno de los hallazgos más destacados del informe tiene que ver con la percepción de seguridad. Desde el año 2021, cuando el 87,7% de los ciudadanos consideraba que la inseguridad había aumentado, la percepción ha mejorado de forma sostenida. En 2024, esta cifra se redujo a 69,3 %, el nivel más bajo desde 2019. Las localidades con mejores resultados fueron Chapinero, Teusaquillo y La Candelaria, mientras que Barrios Unidos, Antonio Nariño y Kennedy presentaron un deterioro en la percepción de seguridad. En el caso de TransMilenio, la percepción de inseguridad creció: pasó del 67,5% al 70,6%, siendo las mujeres quienes reportaron una mayor afectación, con un aumento de 71,1% a 74,5%. Hay que destacar que la saturación de estaciones y paraderos a causa de protestas y manifestaciones fue el fenómeno más asociado con sensaciones de inseguridad, según el 53,2 % de los encuestados. En cuanto a la victimización, se evidenció una ligera mejora. La tasa general bajó de 17,7% a 15,3%, con una reducción significativa en delitos como el hurto a personas, donde la sustracción de celulares pasó de representar el 75% de los casos al 73,1%. También hubo una caída del 2,6 % en los cibercrímenes. No obstante, aumentaron otros delitos como la extorsión, que creció del 5,2% al 7,3%, y el vandalismo, que pasó del 7,6% al 9,9%.