¿Constituyente para qué?
María Sol Navia V
María Sol Navia V.
¿El presidente quiere una constituyente, para qué? Es una retaliación contra el congreso, como muchas de sus actuaciones son para cobrar algo a alguien. El no acepta la base de la democracia que es la separación de poderes, la ausencia de esta es una dictadura. ¿Estamos caminando hacia eso? Él y su ministro de Justicia pretenden acomodar los dictados de la constitución y las leyes a los caprichos del jefe, para eso lo nombró y él aceptó, a plena consciencia, como abogado, que muchos de estos no son viables jurídicamente. Han inventado la tesis del bloqueo institucional como una de sus justificaciones, sabiendo, como dijo el profesor Gaona, que en una democracia eso se llama oposición. El senado, es representante del pueblo y ampliamente, porque reúne la participación, opiniones, peticiones de todas o la mayoría de las regiones y de todos los partidos y a través de sus distintos miembros de sectores económicos y sociales, de agremiaciones y sindicatos. Juntamente con la Cámara de Representantes son el recinto de la democracia. El país está desbaratado, pero no porque el Senado y las cortes estén haciendo su trabajo bastante bien, si no porque no hay gobierno sino un jefe que no lidera, que no tiene equipo y todo el día culpa a sus ministros y arremete contra ellos por el desastre. Pero él los nombra, además los cambia como fusibles o baterías con una frecuencia increíble, así no puede realizarse ningún trabajo, ningún plan de gobierno o de desarrollo, en ninguna empresa menos en el delicado y retador manejo de un país. Lo que el presidente quiere es cambiar la base institucional para abrogarse todos los poderes y no tener control de sus actuaciones, y así despejar el camino para perpetuarse por sí o por algún títere, e imponer una dictadura. Eso está inventado: lo hicieron Hitler, Chávez, Correa, Ortega y varios más a través de la historia. Le incomoda el Congreso porque no le marcha a todos sus proyectos de ley inconstitucionales o inconvenientes, le incomoda la Justicia porque le frena los horrores antijurídicos que reiteradamente comete. Quiere refundar el país sin normas que rijan la institucionalidad y limiten los desmanes del "gobierno del cambio", como también denominó Hitler el suyo en los primeros años. Quiere refundar un país donde no haya empresa privada que tanto le molesta y denigra de ella, donde no haya caña ni otros productos a los cuales difama, y seguramente donde no haya justicia para los criminales y poder sacarlos definitivamente de las cárceles como gestores de una paz cada vez más asesina y mortífera, como ofreció en campaña. Seguramente la constitución requiere ajustes pues la evolución de las sociedades, las tecnologías, pueden desbordar el ordenamiento jurídico, pero todos pueden hacerse, como hasta ahora a la constitución del 91, mediante los procedimientos reglados en ella misma.
Exministra.